La EPA deja multitud de datos que reflejan el mercado laboral. Entre ellos, en Extremadura destaca uno: mientras el número de activos en los últimos doce meses (de marzo de 2017 a marzo de 2018) ha bajado en 1.500 personas, ha crecido en casi 10.000 entre los extremeños mayores de 55 años. De hecho, el número de ocupados en esta franja de edad ha subido en 8.500 el último año en la región. Los activos son aquellas personas que manifiestan en la EPA estar trabajando o en disposición de trabajar, mientras que los ocupados son aquellos que verdaderamente están ganando un sueldo por su trabajo. El número de activos en Extremadura ha bajado en todos los tramos de edad en los últimos doce meses, pero entre aquellos con 55 o más años ha pasado de 73.800 a 83.400. La pirámide poblacional parece tener una explicación. No es que ahora encuentren más trabajo, es que el ‘baby boom’ de los 60 se refleja ahora con trabajadores que se incorporan a esa franja de edad.