Ocho tramos de las carreteras extremeñas se encuentran entre los 145 más peligrosos de España, según recoge el segundo informe de la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA), que analiza toda la Red de Carreteras del Estado.

De los ocho tramos más peligrosos que AEA localiza en Extremadura, dos se encuentran en la provincia de Badajoz.

Uno de ellos, en el punto kilométrico 39 de la carretera convencional N-435, ha registrado ocho accidentes con daños personales y diez víctimas (aglutina heridos graves, leves y muertos).

También en Badajoz, el punto kilométrico 733 de la carretera convencional N-630 se encuentra en esta clasificación, que analiza los 145 tramos más peligrosos de España, 180 si se tienen en cuenta las autopistas de peaje, de las que carece Extremadura.

Esa vía tiene un índice de peligrosidad de 349 puntos y ha registrado dos accidentes con daños personales y cinco víctimas.

En la provincia de Cáceres el tramo con mayor índice de peligrosidad, 750,6 puntos, se ubica en el punto kilométrico 206 de la N-5, zona que ha registrado un accidente con daños personales y una víctima.

La carretera N-110 de Cáceres registra dos tramos peligrosos, uno en el punto kilométrico 368, con seis accidentes con daños personales y 14 víctimas; y otro en kilómetro 371, donde se han producido cinco accidentes con otras tantas víctimas.

El índice de peligrosidad es del 162,4 y el 107,3, respectivamente.

La vía N-630 cuenta con tres tramos peligrosos, según este estudio de la AEA, quien destaca que los puntos afectados son el kilómetro 469, con un índice de peligrosidad de 104,1, y ocho accidentes con daños personales y diez víctimas.

Esta vía también cuenta con el punto kilométrico 492 entre los más peligrosos, con un índice de 248,4 puntos, dos accidentes con daños personales y seis víctimas; y el kilómetro 520, con un índice de 211,2 puntos, tres accidentes y otras tantas víctimas.

El resto de España

El informe ha estudiado 180 kilómetros de carreteras, autovías convencionales y autovías y autopistas de peaje localizados en 53 vías situadas en 37 provincias españolas.

En el caso de las carreteras convencionales, el tramo más peligroso se ha localizado en el kilómetro 192 de la N-420, a su paso por Poblete (Ciudad Real), con un índice de peligrosidad de 1.498 puntos, lo que supera en más de 140 veces la media nacional.

El que más accidentes y víctimas contabiliza está situado en el kilómetro 238 de la A-7, a la altura de Arroyo de la Salud, en Málaga, con 59 accidentes y 96 víctimas.

De los 180 tramos analizados este año, uno de cada cuatro ya aparecían como Tramos de Concentración de Accidentes en el informe del año pasado y sólo cinco están señalizados como "puntos negros", según ha destacado la AEA.

Respecto a la existencia de radares en esos tramos peligrosos, el análisis ha detectado cinco de los más de 1.000 que tiene desplegados la Administración por todo el territorio nacional.

Esta entidad se ha basado para elaborar esta clasificación en el Índice de Peligrosidad Medio obtenido por el Ministerio de Fomento en los Tramos de Concentración de Accidentes de la Red de Carreteras del Estado durante el periodo 2007-2011.

De este informe se desprende que el índice se ha reducido cerca de un 30 por ciento, aunque Automovilistas Europeos Asociados ha destacado que todavía hay en las carreteras españolas "demasiados puntos negros" que es necesario corregir.