Los parlamentos autonómicos son la "clave de la subsidiariedad" en la Unión Europea en tanto y en cuanto que a través de ellos los ciudadanos tienen un lazo directo con el Parlamento Europeo para decidir sobre las acciones que este tome. En este sentido, las Asamblea regionales tienen el "derecho de la producción de las normas legislativas".

Así lo explicó el pasado viernes el director de la Oficina del Parlamento Europeo en España, Ignacio Samper, que compareció en las comisión de asuntos Europeas del parlamento en las que, indicó además, que a través del Tratado de Lisboa, los parlamentos tienen la "posibilidad" de sacar "tarjeta amarilla o roja" respecto a alguna legislación.

Samper explicó que cuando un tercio de los parlamentos autonómicos no están de acuerdo con las decisiones y la legislación que se lleve a cabo desde la UE o piensen que "no se respeta el principio de subsidiariedad", pueden "echar atrás esa legislación y volver a empezar".

El director de la Oficina habló en la comisión acerca del Tratado de Lisboa, cómo afectará su entrada en vigor a los ciudadanos y cómo se pondrá en marcha. Entre otras cosas este acuerdo prevé la designación de un presidente estable para toda la UE y un alto representante de asuntos exteriores a nivel comunitario.