Valoran positivamente que los 63.000 jornaleros extremeños dejen el Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social (Reass) para integrarse en el régimen general pero creen que no es el mejor momento. Las Organizaciones Profesionales Agrarias (Opas) manifestaron ayer a este diario que "en estos momentos y bajo las circunstancias actuales, los agricultores no pueden afrontar el coste que supondría la desaparición del Reass", puesto que la cantidad que tendrían que pagar a la Seguridad Social por trabajador contratado (ahora 10,80 euros al día) aumentaría un 30%.

Según explicó a este diario el presidente de Apag Extremadura Asaja Cáceres, Angel García, el pacto entre Gobierno central y sindicatos contempla un periodo transitorio para que los agricultores asuman ese coste de forma gradual a lo largo de 30 años, de tal manera que la subida no sea tan gravosa para el empresario agrícola. La idea es aumentar ese coste un 3% anual, el equivalente a unos diez céntimos por peonada.

Pero aún así, desde Apag creen que es demasiado para los agricultores teniendo en cuenta la crisis actual y la bajada de la renta agraria, por lo que proponen que para compensar, el convenio del campo --que regula la subida anual del sueldo de los jornaleros-- quede congelado durante tres años. "No sabemos qué aceptación tendrá esta medida entre los sindicatos y el resto de organizaciones, pero creemos que esto ayudará", señala Blanco. "Hay que hacer algo porque entendemos que es necesario que se igualen las condiciones de trabajo y jubilación de los empleados agrarios con el resto, porque la jubilación a los 67 es un navajazo para los trabajadores del campo", continúa.

Y es que, la desaparición del Reass dará a los empleados agrícolas los mismos derechos y niveles de protección que el resto --sobre todo en prestaciones por desempleo, jubilación y maternidad-- y hará que coticen por el salario real que perciben y no por bases inferiores como hasta ahora.

Ignacio Huertas, secretario general de Upa-Uce Extremadura también comparte la opinión de Apag. Huertas cree que no es un buen momento para que los agricultores hagan frente a este coste y por ello pide que parte de ese coste, al menos en un primer momento, sea asumido por la Administración. "Cualquier mejora es bienvenida en el sector, pero los productores difícilmente podremos pagar", señala Huertas.

La integración de los jornaleros en el régimen general es una vieja reivindicación que ya ha sido incluida en diversos pactos firmados por el Gobierno central y los sindicatos. La primera vez fue en 1995, después en el 2006 y ahora en el acuerdo firmado el pasado miércoles entre ambas partes. No obstante, la medida ahora tendrá que normatizarse, aunque se espera que la incorporación comience en enero del 2012.

Por su parte, los sindicatos CCOO y UGT señalan que la integración del Reass en la Seguridad Social "saldará una deuda histórica".