España ha jugado "un papel importante" en la construcción europea, "porque ha tenido un desarrollo económico importante, acompañado de una gran fidelidad a la comunidad", según indicó ayer en declaraciones a este diario, el exministro de Asuntos Exteriores, Marcelino Oreja, al término de las jornadas que han tenido lugar esta semana en el Real Monasterio de Yuste. Este encuentro ha sido organizado por la Fundación Academia Europea de Yuste y la Asociación para el Desarrollo Integral de la Vera, bajo el epígrafe de Nuevos contextos y estrategias en el marco de la Unión Europea .

Marcelino Oreja, que además ha sido comisario durante dos legislaturas, subrayó que nuestro país "ha aprovechado mucho las ventajas comunitarias" relacionadas con la defensa de "unos valores como la democracia y el imperio de la ley", sin olvidar el aspecto económico, junto a "los beneficios que han obtenido las infraestructuras españolas, no por un acto de caridad, sino de justicia".

Por el contrario no se arriesgó a aventurar como va a ser el futuro de la Unión Europea, a la que se sumarán con toda probabilidad Rumanía y Bulgaria. Sí reconoció que la apatía que sienten los ciudadanos por los temas europeos, posiblemente se deba a que los políticos "no hemos sabido transmitirles la razón, ni la emoción de Europa". Por último señaló como una gran novedad la creación de la figura del ministro de Asuntos Exteriores, aunque teme que va a ser necesario que se entienda con el presidente de la Comisión, "porque de lo contrario, el conflicto puede ser eterno".