El orgullo por la idiosincrasia del pueblo extremeño y el tono reivindicativo, han marcado los discursos de los líderes de los partidos durante el acto institucional por el Día de Extremadura en la Asamblea y quienes también han compartido referencias a retos como el cambio climático y la despoblación.

En el acto institucional, que ha comenzado con la interpretación del Himno de España a cargo de la Joven Orquesta Ciudad de Mérida, han intervenido, por este orden, la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, el alcalde Antonio Rodríguez Osuna, los portavoces de los grupos parlamentarios y para cerrar, el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.

Éste ha aprovechado su discurso para trasladar 10 reivindicaciones a España y Europa, entre ellas la mejora de la infraestructura ferroviaria, un nuevo modelo de financiación autonómica y una PAC justa para el campo extremeño.

Además, ha aludido a dos "grandes retos" del planeta: el cambio climático, que urge a un nuevo modelo de desarrollo sostenible, y "la despoblación y la crisis demográfica", lo que conlleva "una nueva manera de entender y gestionar las migraciones".

Tanto el jefe del Ejecutivo regional como la presidenta de la Asamblea han coincidido en condenar el racismo y la xenofobia a propósito de la crisis migratoria en el Mediterráneo.

"Se trata de decir si se está o no de acuerdo con que la gente muera en el Mediterráneo, de que haya vidas de segunda o de tercera", ha dicho Vara, mientras que Martín ha subrayado que Extremadura, pueblo de inmigrantes, debe "plantar la bandera de la humanidad y alzar la voz contra cualquier odio deshumanizador".

Del fenómeno del despoblamiento ha hablado especialmente el presidente del Grupo Parlamentario Popular, José Antonio Monago, para quien "si frenar la despoblación no es nuestra prioridad hoy, será nuestra vergüenza mañana", por lo que ha exigido medidas urgentes.

La Extremadura "vaciada" solo se puede llenar "si hay empleo y oportunidades", ha agregado Monago, que ha destacado además que Extremadura, frente a otros territorios, "se ha hecho a sí misma" y conquistado sus derechos "sin perjudicar a nadie, sin chantajes ni amenazas al conjunto de la nación".

Iniciativas "distintas" para obtener "resultados diferentes" en el camino del progreso es lo que ha solicitado el portavoz del Grupo Ciudadanos, Cayetano Polo, que no se resigna a pensar que Extremadura no puede salir del "vagón de cola", para lo que "hay que luchar".

Polo ha incidido en la importancia de que las administraciones "no pongan problemas" a las empresas y emprendedores, verdaderos artífices de la creación de empleo.

La portavoz del Grupo Parlamentario Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, ha afirmado que Extremadura no necesita la solidaridad por ser una región desfavorecida, necesita "la justicia por ser el pulmón y la despensa" de España, "justicia territorial" que le permita avanzar hacia "el equilibrio".

De Miguel ha vuelto a reivindicar que el Día de Extremadura se celebre el 25 de Marzo, día en que se produjo el levantamiento de 80.000 yunteros en la comunidad, y ha aludido a otro hito y "victoria colectiva": la gran manifestación de 30.000 personas en contra de la Central Nuclear de Valdecaballeros hace 40 años, hechos que desmienten "la inmovilidad del pueblo extremeño".

Y la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Lara Garlito, ha subrayado la importancia de la responsabilidad política a la hora de ser útil a la ciudadanía, pues, de lo contrario, "se lastrará el presente y el futuro" de esta comunidad autónoma.

La interpretación del Himno de Extremadura ha puesto el broche final a este acto, que dará paso esta noche al de entrega de las Medallas de Extremadura en el Teatro Romano de Mérida y mañana, 8 de septiembre, a la misa pontifical en el Monasterio de Guadalupe.