La entrada en vigor a partir de este año del sistema de pago único para las ayudas de la Política Agraria Comunitaria (PAC) afectará a unos 70.000 agricultores extremeños, según estimaciones de la Dirección General de Política Agraria Comunitaria de la Junta. Con este nuevo procedimiento, que es una de las consecuencias de la Revisión Intermedia de la PAC aprobada en el 2003, se sustituye el sistema de ayudas proporcionales a la cosecha o a la cifra de cabezas de ganado que se posean por otro desacoplado, en el que se desvinculan, total o parcialmente, producción y ayudas.

En el primero de los casos, si el desacoplamiento es total, se percibe el cien por cien del importe en función de la media de las ayudas recibidas en las campañas 2000, 2001 y 2002, con las únicas condiciones de mantener la explotación que generó esos derechos y de respetar una serie de prácticas relativas al medio ambiente. De esta manera, se puede, incluso, no producir y seguir recibiendo ayudas.

Si el desacoplamiento es parcial, una parte se cobra de forma fija de acuerdo al promedio de los últimos años, y el resto se ingresa atendiendo al nivel de producción o al tamaño de la cabaña ganadera.

La proporción de las ayudas que queda desvinculada de la producción varía dependiendo de cada sector. Así, en el vacuno permanece acoplado todo su importe, de forma opuesta a lo que sucede en el olivar, cultivo en el que se desvincula un 95%. Para el ovino-caprino se establece un 50% de desacoplamiento, proporción que aumenta hasta el 75% en los cultivos herbáceos.

El objetivo que pretende esta reforma es que los agricultores orienten mejor sus producciones a las exigencias del mercado y los consumidores.

Aunque se fijó el 2005 como año de entrada en vigor del pago único, finalmente se contempló la posibilidad de que los Estados miembros la retrasasen hasta el 2006 o el 2007. En España, el Ministerio de Agricultura y las comunidades acordaron la puesta en marcha del nuevo sistema para el 1 de enero de este año.

La cifra de 70.000 agricultores, sin embargo, no es todavía definitiva y podrían registrarse variaciones en este censo durante los próximos meses. De momento, la Junta de Extremadura ha enviado 95.000 cartas a otros tantos profesionales del campo informándoles de los derechos adquiridos en las campañas de referencia y el dinero en el que se traducirán los mismos.

Estos cálculos pueden ser recurridos ante el Ministerio de Agricultura. Una vez que éste las haya resuelto, preparará una base de datos actualizada con la información definitiva que le será transmitida a las diferentes comunidades autónomas.

Extremadura recibió en el 2004 633,1 millones de euros de ayudas agrarias de la Unión Europea. De ellos, casi una quinta parte (121,8 millones, un 19,2%) fueron para los cultivos herbáceos, proporción muy similar a la percibida por el sector del vacuno (18,8%), con 119,3 millones. A continuación figuran el del ovino y caprino (99,6 millones y un 15,7%) y el tabaquero (96,4 millones y un 14,5%).

Después, casi a la par, aparecen el del tomate, el del olivar, y el vitivinícola, con cantidades que superan los 46 millones de euros (más de un 7% del total).