La Confederación Empresarial Extremeña (Creex) acogió ayer con satisfacción la reforma fiscal anunciada por el presidente de la Junta, José Antonio Monago, pues cree que generará "actividad y negocio" y fomentará la creación de empleo a medio y largo plazo.

La decisión del Gobierno extremeño "dejará más dinero en el bolsillo de los ciudadanos" y "favorecerá la competitividad de las empresas extremeñas", según indicó en una nota de prensa el secretario general de la patronal extremeña, Francisco Javier Peinado, unas declaraciones que reiteró también antes de su comparecencia en el Parlamento extremeño, en Mérida.

Dentro de esa reforma fiscal, que entraría en vigor en enero de 2015, los extremeños que deban pagar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones "podrán elegir entre abonarlo directamente a la administración o reinvertirlo en la sociedad", añadió.

En este último caso se impulsaría a "las pymes extremeñas actuando como business angels", una medida que puede aportar una financiación extra de hasta 19,5 millones de euros para este tipo de empresas de la comunidad autónoma.

Asimismo, el Gobierno extremeño ha anunciado que va a mantener las exenciones en las tasas vinculadas al inicio y ampliación de una actividad económica, tal y como se valora desde la patronal. Además se reducirá en un 50 por ciento los impuestos autonómicos a todas las nuevas empresas que se instalen en Extremadura, así como a las que realicen nuevas inversiones o ampliaciones.

Por su parte, el secretario general de CCOO de Extremadura, Julián Carretero, aseguró no entender que el Gobierno regional plantee una rebaja fiscal "para reducir ingresos" en las arcas autonómicas, cuando "uno de los problemas que está teniendo la renta básica, y por eso la están mareando tanto, es porque no tienen dinero para pagarla".

Carretero destacó que sobre esta rebaja fiscal anunciada este lunes por el presidente extremeño, José Antonio Monago, "no hay nada nuevo en el horizonte", ya que así se anunció en el Debate sobre el Estado de la Región, y a su juicio supone "un planteamiento fuera de toda una coherencia en términos de política económica y social".