La búsqueda de mercados alternativos y la protección de los trabajadores son dos de las demandas que la patronal y los sindicatos han formulado a la Junta de Extremadura y la Delegación del Gobierno para afrontar el impacto del ‘brexit’. Ambos se han sumado al grupo de trabajo creado por las administraciones central y autonómica ante la salida de Reino Unido de la Unión Europea y asistieron ayer a una nueva reunión en Mérida presidida por la vicepresidenta de la Junta, Pilar Blanco-Morales. En el encuentro se les expuso el plan de medidas diseñado en base a un «brexit duro», sin acuerdo, por ser «el más pernicioso» para la región.

El secretario general de la Confederación Empresarial Extremeña (Creex), Francisco Javier Peinado, consideró que los efectos «no tienen que ser especialmente lesivos» para la economía extremeña dado que sus exportaciones al mercado británico solo representan el 5%. No obstante, «hay que intentar no perderlo, bien en el Reino Unido o buscando mercados alternativos», subrayó Peinado, que insta a poner el foco en el sector de la fruta de hueso.

Por su parte, la secretaria regional de UGT, Patrocionio Sánchez, expresó su preocupación por que las empresas estén «protegidas» para que el brexit no afecte al empleo. En este mismo sentido se pronunció su homóloga en CCOO, Encarna Chacón, que pidió ese amparo para los extremeños que prestan sus servicios en territorio británico.