El coordinador regional de IU, Pedro Escobar, afirma que, si finalmente optan por facilitar un gobierno del PP en Extremadura mediante la abstención, tendrán que dar "muchas explicaciones" a la dirección federal, "y luego Madrid tendrá la patata caliente".

"Si la decisión mayoritaria en Extremadura va en un sentido, le diremos que esa decisión nos parece la mejor", manifiesta Escobar y añade que "estaría bueno que fuésemos víctimas de nuestro éxito".

Señala que la "confrontación" con la dirección federal por la constitución de los ayuntamientos se superará "con más o menos nota" y, probablemente, también en lo relativo a la Presidencia del Parlamento regional.

Sin embargo, en el caso de la investidura del nuevo presidente de Extremadura, la decisión "sigue siendo difícil" y, en última instancia, si se opta por facilitar un gobierno del PP mediante la abstención, "tendríamos que dar muchas explicaciones a Madrid y luego Madrid tendrá la patata caliente".

Tras reconocer que la dirección federal está muy condicionada por la cercanía de las elecciones generales, apunta que los dos argumentos que se barajan en esta tesitura son de peso: "Que IU permitió gobernar a la derecha, o no vale la pena que votes a IU porque al final esos votos van al PSOE".

Escobar lamenta además que desde una posición "informativamente interesada" se esté transmitiendo una debilidad en el liderazgo de Cayo Lara ante la conformación del nuevo gobierno extremeño y afirma que intenta buscar un "equilibrio" entre la dirección federal y las bases de la coalición.

El coordinador regional explica que existe un mapa socioinformativo que tiene sus preferencias y que, pese a que la tendencia histórica es que ha habido un entendimiento entre las candidaturas del PSOE e IU, convierte en noticia las "pequeñas excepciones".

En cualquier caso, argumenta que hay que guardar un "equilibrio" entre las orientaciones y consejos que pueda ofrecer Cayo Lara como líder de IU y las bases, "que están para algo, no sólo para pegar carteles y pagar la cuota".

Por otra parte, se reafirma en que no abrirá expedientes a los ediles que el sábado facilitaron que varias alcaldías acabaran en manos del PP porque "antes de echar a un alumno de clase tengo que hablar mucho con él y, en última instancia, a lo mejor en vez de echarle a él me voy yo temporalmente".

Subraya que no tomará esta medida contra compañeros que llevan décadas trabajando en su pueblo "y aguantando el palo de ser una fuerza minoritaria y marginada", pues "por ahí yo no voy a pasar".

"Otra cosa es que recabemos información de lo ocurrido en cada pueblo, pero la vía disciplinaria, me niego".