Según la puntuación otorgada por los conductores, las carreteras españolas están mejor valoradas que sus señales. La peor puntuación fue recibida por las señales de las ciudades. Según los datos del estudio, existe una tendencia general entre los conductores a creer que la señalización a nivel nacional es mejor que la de su comunidad y ésta mejor que la de la ciudad donde reside.

Al analizar la utilidad o problemas que originan las señales, un 40% de los conductores piensa que el principal problema es el de la orientación de las mismas. Para un tercio de los entrevistados las señales obligan a realizar maniobras bruscas; y un 19% cree que su mala colocación o estado son causa de accidentes.

Más de un tercio de los conductores encuestados afirma que hay señales equivocadas, mal puestas o contradictorias en las carreteras. Las señales luminosas son las más valoradas, seguidas de la señalización vertical. Las peor puntuadas son las marcas viales.