Reducir las peonadas para facilitar el acceso de los jornaleros eventuales al subsidio agrario, antes conocido como PER. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunció el pasado martes la puesta en marcha de un plan de acción para el sector agroalimentario y ganadero con el objetivo de hacer frente a la subida de los aranceles planteada por la administración estadounidense, en caso de que esta se materialice. El plan del líder socialista prevé reducir las peonadas necesarias para poder acceder al subsidio agrario en Extremadura y Andalucía, aunque hasta la fecha no ha concretado nada. En la región, la noticia ha sido bien recibida entre los representantes de los trabajadores y las organizaciones agrarias, aunque no faltan las salvedades, ya que también reclaman medidas concretas que generen empleo.

Según el informe de prestaciones por desempleo publicado por el Gobierno central relativo al mes de agosto, en la región hay 13.314 trabajadores que cobran el subsidio agrario, lo que supone un coste para el Estado de unos seis millones de euros. Por provincias, 8.606 lo perciben en la de Badajoz y 4.708 en la de Cáceres. Para acceder a la paga es necesario haber cotizado un mínimo de 35 jornadas en los doce meses naturales inmediatamente anteriores a la situación de desempleo, aunque el número de peonadas se puede reducir a 20 por factores climatológicos adversos que dificulten llegar a esos jornales. El importe que perciben los demandantes es de 430,27 euros mensuales que pueden cobrar durante seis meses, en el caso de que el beneficiario tenga menos de 52 años, ya que quienes superen esta edad podrán cobrarlo durante un año.

El secretario general de FICA UGT, Miguel Talavera, considera «positivo» que se reduzcan las peonadas, aunque reclama concreción a Sánchez sobre el número que quiere fijar. «En la comunidad hay zonas donde tienen muy complicado llegar incluso hasta las 20 peonadas», afirma. A su juicio, la sequía que afecta a la región, el brexit y los aranceles de Donald Trump harán cada vez «más imprescindible» esta reducción, al considerar que «bajará el volumen de trabajo y la mano de obra o las peonadas necesarias para cualquier trabajo».

Por su parte, el secretario de acción sindical de la Federación de Industria de CCOO, Jesús Martín, también aprueba una medida que «llevamos muchos años reclamando», aunque la tilda de «insuficiente», ya que los trabajadores «están reclamando realmente los puestos de trabajo que se han perdido este año y esos ingresos que les podrían originar». «Demandamos que se afronte esta situación generando empleo en los ayuntamientos o localidades que se han visto afectadas», puntualiza.

«Parece ser que Sánchez sí reconoce que tenemos un problema real en el campo, tanto por la sequía como por los bajos precios, que está conduciendo a la reducción de trabajo y de ahí a la reducción de peonadas», indica Juan Metidieri, presidente de APAG Extremadura Asaja.

Ayudas para el sector

El representante de la organización agraria reclama al líder socialista que «se dé la misma prisa en habilitar ayudas para el sector primario, que es tan necesario para la fijación de población en zonas rurales». Metidieri sostiene que el anuncio de Sánchez «favorece el desempleo en un momento en el que hay dificultades para recoger las cosechas».

Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE Extremadura, señala que es una medida positiva en años como el actual, en el que «no podemos dar el empleo que daríamos en una campaña normal y va a permitir que los trabajadores se queden en el territorio y podamos tener mano de obra disponible cuando la necesitemos». Pese a esto, lo que esperan realmente desde UPA-UCE son «medidas concretas que afecten a los agricultores y ganaderos».

«No estamos en contra de que se le reduzcan las peonadas a los trabajadores, pero sí exigimos que a la misma vez que se acuerda eso, se acuerden las ayudas concretas para el sector agrario afectado», sostiene Juan Moreno, presidente de COAG Extremadura.