La organización agraria UPA-UCE Extremadura alertó ayer de la «gravedad» de la sequía en la región, cuyas pérdidas cifra en 336 millones de euros, por lo que pide la puesta en marcha de «medidas urgentes», entre las que aboga por revisar el funcionamiento y rectificar los datos del seguro de sequía en pastos. El secretario general de la organización, Ignacio Huertas, manifestó ayer que este año está siendo el tercero más seco en lo que va del siglo XXI, por lo que reiteró la necesidad de aplicar «medidas urgentes para paliar sus efectos en nuestra región».

La falta de lluvias y las altas temperaturas «hacen que la sequía se agudice cada día más y la falta de agua genere mayores problemas en el campo», una situación que afecta a cultivos como el olivar y el viñedo. En el caso del olivar, Huertas calcula que la sequía está provocando una reducción del 38% de la producción y unas pérdidas de 60,2 millones de euros, mientras que en el caso del viñedo, la producción se reducirá más del 30%, y las pérdidas superarán los 41 millones de euros.

En su intervención, Huertas alertó de que en el sector ganadero donde a las pérdidas por alimentación se suman los problemas de abastecimiento de agua para el ganado, por lo que cifra las pérdidas en los 171 milloones de euros, mientras que en el caso de la apicultura, éstas alcanzan los 10 millones.Los cereales de invierno, por su parte, registran una merma de producción del 40 por ciento y unas pérdidas de 54 millones, señaló UPA-UCE a través de nota de prensa. «Tenemos que hablar de una situación de emergencia para el secano», subrayó.