"Por un lado, se han creado grupos que ofrecen mayor solvencia pero, por otro, creo que hemos perdido una gran oportunidad de hacer una entidad financiera fuerte para Extremadura", apunta José Alberto Hidalgo, presidente de la Agrupación de Empresas Laborales de Extremadura (Aexel). En su opinión, en primer lugar se debería haber ido a una fusión de las dos cajas extremeñas, y buscar luego "alianzas estratégicas" con otras de comunidades próximas --andaluzas, por ejemplo--, de forma que se mantuviese "la influencia" extremeña en los grupos resultantes.