El Diario Oficial de Extremadura publicó ayer la orden por la que se establece la época de peligro alto de incendios forestales, que comenzará el 1 de junio y finalizará el 15 de octubre. El ámbito de aplicación se extenderá a todos los terrenos forestales y su zona de influencia, aunque las prohibiciones y limitaciones se aplicarán también al suelo agrícola, urbanos e industriales, en espacios abiertos y semiabiertos. Aunque el periodo de riesgo termina el 15 de octubre, en función de las condiciones meteorológicas podrá prorrogarse.

Conforme a este decreto, están sometidas a autorización de Medio Ambiente las carboneras y, excepcionalmente por motivos fitosanitarios, las quemas de rastrojeras en zonas regables previamente así informadas por Sanidad Vegetal. También el lanzamiento de cohetes, fuegos artificiales, globos o artefactos análogos que produzcan fuego, y el uso de maquinaria, herramientas y aperos con riesgo de incendio. La consejera de Medio Ambiente, Begoña García, expresó su deseo de que en la temporada alta de riesgo de incendios "no haya ningún pirómano que nos incendie el monte". Según explicó, se ha trabajado durante el invierno y espera que no haya demasiados incendios, aunque debido a las últimas lluvias hay mucho pasto en el campo.