Villanueva de la Vera vivió ayer a lo grande la fiesta del Pero-Palo, que por primera vez en varios años contó con la ausencia casi total de ecologistas que vigilaran los pasos del burro que participa en la denominada Corrida de las Elecciones .

Las manecillas del reloj que preside la fachada del Ayuntamiento señalaban las 10.00 de la mañana cuando un grupo de mozos llegó a la plaza del escultor Aniceto Marinas acompañando al asno que momentos después iniciaría el recorrido tradicional, mientras un joven subido a sus lomos trataba de comunicar al vecindario que la justicia acababa de dictar una sentencia por la cual se condena a muerte al Pero-Palo, tras considerar que es culpable "por ser ladrón de corrales".

Delante de la comitiva la chiquillería tiraba de una soga entonando canciones populares, varias de ellas relacionadas con el célebre burro de la Tía Vinagre . Por otro lado, se sucedian de forma incesante los paseos con el muñeco que representa al Pero-Palo, el tremolar de banderas desde el Ayuntamiento y la entrega, por parte del sacerdote, de las alabardas.

Hora y media después de haber comenzado, finalizaba La Corrida de las Elecciones y el burro regresaba por su pie, sano y salvo, al remolque del todoterreno que le devolvería a la finca donde reposará durante todo el año hasta que vuelva el próximo martes de Carnaval. El alcalde, José Antonio Rodríguez, señaló a los periodistas el buen estado físico que presentaba el animal, tras insistir en el giro dado por los grupos conservacionistas, "que ahora dicen que hay maltrato psicológico al burro, porque ya no saben qué van a argumentar", ante la evidencia de los hechos "que demuestran claramente que el burro no es castigado físicamente". Lo mejor para acabar "con todos los bulos y mentiras es que vengan a ver la fiesta".

En este sentido, Iván Salvia, de la Asociación el Refugio del Burrito, reconoció en declaraciones a EL PERIODICO: "Aunque no le hemos auscultado, el burro presenta buen aspecto. Sin embargo, se ha caido más veces que el año pasado". Por ello, recomendó al Ayuntamiento que no tenga todo el año ocioso al burro en la finca. "Sería mejor que éste anduviese un poquito", dijo.

Los actos concluyeron por la tarde con la quema de los restos del pelele.