Un "mayoritario apoyo" del conjunto del personal adscrito a las inspecciones de trabajo de Badajoz y de Cáceres han tenido, según los sindicatos de UGT y CCOO, las movilizaciones convocadas en demanda de mejoras laborales y salariales. Los paros, que comenzaron ayer de 12.00 a 12.30 horas, se llevarán a cabo todos los jueves del mes de octubre, informó la FSP-UGT.

UGT recordó que este conflicto se inició en los primeros meses del 2006, cuando la Dirección General de la Inspección negoció con asociaciones de inspectores una subida de productividad por objetivos de un 30%. "Con esta subida los inspectores logran 950 euros y los subinspectores 650 euros al mes de productividad, en cambio el resto de personal percibe la cantidad de 32 euros al mes, un reparto discriminatorio con el que ni los sindicatos ni los trabajadores están conformes". Y además, aseguró, desde el 13 de julio del 2006 la Dirección General de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social "ignora todas las propuestas de los sindicatos", hechos estos que han motivado la llamada a la movilización y la huelga.