Huelga de docentes para terminar el curso escolar. El sindicato del profesorado PIDE anunció ayer la convocatoria de 20 días de huelga (del 10 al 30 de junio) para todo el personal docente de la enseñanza pública no universitaria, que podrá sumarse los días que consideren -no es necesario seguir los 20 días, precisan-. A la huelga se suma también una concentración el 10 de junio en Mérida.

Con este calendario de movilizaciones el sindicato extremeño quiere denunciar la decisión de la Consejería de Educación de volver a las aulas «sin garantizar la salud del personal docente» frente al coronavirus y también la propuesta de la Inspección que plantea un recorte de 540 plazas docentes en las plantillas funcionales del próximo curso.

El sindicato señala en una nota de prensa que la administración educativa no ha donado de equipos de protección individual a todos los docentes ni de equipos de protección colectiva a todos los centros educativos. «No se garantiza la adecuada limpieza e higienización en todos los centros de trabajo», asegura el sindicato, para el que la configuración de los centros educativos, su estado y sus características habitacionales no garantizan las adecuadas distancias interpersonales o sociales de seguridad mínimas establecidas.

En cuanto a la concentración, prevista para el 10 de junio, será a las 11 horas en la puerta principal del Edificio III Milenio de Mérida, salvaguardando todas las medidas de seguridad tales como el uso de mascarillas y separación interpersonal de dos metros. «Será un acto de protesta contra la vuelta a las aulas en junio sin garantizar plenamente la salud de los docentes y contra la reducción de las plantillas docentes, que provocará que muchos profesores se queden sin plaza, sobre todo los docentes interinos».

Las movilizaciones también van contra el aumento de horas lectivas, así como el aumento de las ratios, «que conllevará una dificultad de atención a los alumnos», contra el incumplimiento de la reducción horaria de los docentes mayores de 55 años y por la suspensión de la subida salarial del 2% a los empleados públicos. A juicio de PIDE, la consejera de Educación, el secretario general de la Consejería y el secretario general de Educación deberían presentar su dimisión, o ser cesados cuanto antes por el presidente de la Junta. Esta última petición también la realizó el pasado sábado la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras, que pidió la dimisión de la consejera del ramo.

Desde el sindicato CSIF, por su parte, denunciaron ayer la falta de negociación real de la Consejería de Educación. «Su gestión caótica, que han tenido que salvar los docentes con su esfuerzo, se paga con nuevos recortes» y señala que mientras algunas organizaciones piden dimisiones, para CSIF lo que urge son las soluciones.

Más quejas contra la reducción de plantilla

Los sindicatos docentes no son los únicos que están alzando la voz contra un estudio ténico de la Inspección Educativa que plantea la reducción de 540 plazas docentes de las plantillas funcionales del próximo curso escolar. Al margen del movimiento sindical, en los últimos días se ha creado un grupo llamada Movimiento por la Defensa de la Educación Pública Extremeña (Depex) que suma más de 1.500 seguidores y que denuncia los «abusivos» recortes que plantea la administración educativa, lo cual supondría dejar ratios de alumnos por clase «en las que será muy complicada llevar a cabo nuestra labor docente», además de los problemas de salud pública que, dicen, esto puede conllevar ante la pandemia de coronavirus. Piden a la Junta que cumplan también con lo pactado también respecto a las mejores de las condiciones docentes y llaman a la comunidad educativa, así como a los grupos parlamentarios, a sumarse a sus reivindicaciones para defender la educación pública de calidad en una movilización que plantean aún sin fecha.

Este grupo docente apunta también que todo el colectivo «ha demostrado, una vez más, saber estar a la altura de las circunstancias a pesar de las adversidades sostenidas y de la ineficacia de la gestión política».