Las organizaciones agrarias APAG Extremadura Asaja y UPA-UCE solicitaron ayer declarar como zonas catastróficas los municipios extremeños afectados por el pedrisco de los últimos días, con el fin de que los agricultores perjudicados puedan recibir ayudas. Asimismo, también reclamaron a Agroseguro agilidad en las peritaciones y que los pagos sean «acordes a los daños reales» que se han producido en cultivos como el tomate, los frutales o el maíz. Una petición esta última a la que se sumó la Junta, cuyos técnicos realizaban ya ayer inspecciones ‘in situ’ para elaborar un informe con una valoración de las mermas ocasionadas.

El granizo y las fuertes lluvias han tenido como ‘epicentro’ la localidad pacense de Santa Amalia, pero han castigado en mayor o menor medida a otras muchas poblaciones de la región. UPA-UCE remarcó ayer mediante un comunicado que las tormentas han dejado un panorama «preocupante y desolador» en el campo extremeño, que ha agravado «aún más la situación tras el temporal de principios de mayo». En muchas explotaciones los agricultores «lo han perdido todo en unas pocas horas». Igualmente, exigió que se tomen las medidas excepcionales necesarias con el objetivo de «solucionar la grave situación en la que se encuentran las explotaciones extremeñas», tras lo que anunció que solicitará una reunión a la consejera de Medio Ambiente y Rural, Begoña García Bernal, y a la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera,

De acuerdo a la información manejada por esta organización, además de en Santa Amalia, también se han producido daños por las tormentas en las localidades cercanas de Yelbes, Valdetorres o Guareña, mientras que en las Vegas Bajas las que acumularon más agua y granizo fueron Puebla de la Calzada y Valdelacalzada, donde se pueden «apreciar fuertes impactos en las distintas variedades de frutales».

En Arroyo de San Serván hubo daños como consecuencia de la crecida del arroyo Tripero, y Miajadas, donde se registraron 50 litros por metro cuadrado, tampoco se salvó de las inclemencias meteorológicas, quedando arrasadas plantaciones de tomate temprano y completamente inundadas otras de maíz. La comarca que registró las inundaciones más importantes fue, en cualquier caso, Tierra de Barros, con «graves daños en las plantaciones de viñedo debido a la intensa lluvia», que también causó estragos en Escurial, Conquista de la Sierra, Almoharín, Montehermoso, El Batán, Morcillo y La Moheda de Gata.

SUMARSE A LA PETICIÓN / Desde APAG Extremadura Asaja se confió en que aquellos consistorios y cooperativas que se hayan visto «perjudicados» por las lluvias y el granizo se sumen a la petición de que todos estos términos municipales sean declarados como zonas catastróficas. Miembros de esta organización se trasladaron ayer a Santa Amalia para comprobar los destrozos ocasionados y recoger las «reclamaciones, preocupaciones y malestar» de los agricultores, que tras mucho esfuerzo y trabajo, «ahora ven peligrar sus explotaciones».

El presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri, reclamó que la Consejería de Medio Ambiente y Rural «cuantifique y zonifique cuanto antes» las parcelas aradas dedicadas al cultivo del tomate, maíz o frutales para que los profesionales del campo «afectados» cuenten con «soluciones concretas y cercanas». Entre ellas, propuso un fondo de contingencia para cubrir los daños específicos, ya que «este tipo de situaciones requiere medidas excepcionales».

En este sentido, desde la Junta se informó ayer que técnicos de la Consejería de Medio Ambiente y Rural están realizando inspecciones ‘in situ’ para elaborar un informe con una valoración de los daños ocasionados por las tormentas que será remitido a la Delegación del Gobierno para solicitar, si se estima, la declaración de zona catastrófica y las compensaciones económicas que puedan corresponder. El director general de Agricultura y Ganadería, Antonio Cabezas, visitó a primera hora de ayer una explotación agraria afectada por el granizo en Santa Amalia.

La delegada del Gobierno, Cristina Herrera, aseguró por su parte que se paliarán «en la medida de lo posible» los daños producidos por las últimas tormentas caídas e hizo hincapié en que ya se ha puesto en contacto con «algunas» organizaciones agrarias para conocer las pérdidas que se han producido.

Desde el Grupo Parlamentario el PP en la Asamblea, su portavoz de Agricultura, Francisco Ramírez, reiteró a la Junta su petición para que cree un fondo regional, distinto al de contingencia, para atender de manera «urgente» y «prioritaria» los daños que se deriven de las inclemencias meteorológicas. Para ello, registró para su debate en pleno, una propuesta de impulso instando a su puesta en marcha. Según recordó Ramírez, aunque el Parlamento apoyó mayoritariamente la generación de este fondo en el Debate del Estado de la Región del 2017, en la aprobación de los presupuestos regionales para el presente ejercicio dicho fondo no fue recogido.