El alcalde de Plasencia y nuevo presidente de la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura (Fempex), Fernando Pizarro, es un defensor del "papel fundamental" de las diputaciones, al tiempo que sostiene que las mancomunidades "tienen su razón de ser" siempre y cuando se mantengan fieles a su "principio fundamental y sus orígenes".

Pizarro considera que "en el caso de las dos provincias extremeñas y en el de la mayor parte de España" las diputaciones son "fundamentales" porque "ayudan a mantener determinadas políticas" en materia de infraestructuras hídricas, de suministro eléctrico, culturales o deportivas que "de otra manera no tendrían la posibilidad de desarrollarse en los municipios" de menos de 20.000 habitantes, que en Cáceres son todos salvo la capital y la propia Plasencia. Además, el máximo representante del municipalismo extremeño recuerda que las diputaciones "cumplen un papel esencial" que no se suele tener en cuenta, que es el de fijar población sobre el territorio. Pizarro recuerda que "las políticas que desarrollan las diputaciones y las ayudas permanentes que prestan, dirigidas a las personas que viven en esos municipios, sirven para mantener pobladas las áreas rurales".