Una placa conmemorativa recordará desde mañana la fundación hace 95 años de El Periódico Extremadura en el palacio de la Generala, actual sede del rectorado de la Universidad de Extremadura. A las diez y media de la mañana se descubrirá en la puerta del edificio en un sencillo acto. En este distintivo, realizado en bronce, se recordará que allí se fundó este diario el 1 de abril de 1923 y se rinde homenaje a quienes lo hicieron posible hasta nuestros días.

La leyenda de la placa es la siguiente: «En este edificio, Palacio de la Generala, se fundó El Periódico Extremadura, decano de la prensa regional, el 1 de abril de 1923. En su 95 aniversario se rinde homenaje a cuantos lo hicieron posible todos estos años. Cáceres, 1 de abril de 2018».

Al acto, que será prologado por Antonio Cid de Rivera, director de El Periódico Extremadura, asistirán Elena Nevado, alcaldesa de Cáceres; Segundo Píriz, rector de la Universidad de Extremadura; Isabel Gil Rosiña, portavoz de la presidencia de la Junta de Extremadura; el obispo de Coria-Cáceres, Francisco Cerro; y José Andrés Mendo, vicepresidente de la Asamablea de Extremadura, entre otras autoridades.

El homenaje contará también con la asistencia de antiguos empleados que estuvieron trabajando en el palacio de La Generala hasta el año 1973, así como de sus familiares. Junto a ellos estarán los actuales trabajadores del periódico.

Este palacio se encuentra en la ciudad monumental de Cáceres y fue construido en el siglo XV y reformado en el XVIII. Destaca en la fachada un arco de medio punto con los escudos de las familias Ovando-Mogollón. Su nombre se debe a que en el siglo XVIII allí residió María Josefa de Ovando, casada con el general Antonio Vicente de Arce.

Esta sede del diario fue testigo del interés por la tecnología de sus directores. En febrero de 1925 puso en marcha una estación receptora de telefonía sin hilos. En marzo del 1926 comenzaron las dos ediciones diarias, una que cerraba a las cuatro de la mañana y otra a las seis de la tarde.

En abril con motivo de las bodas de plata del diario (1948) se recibió el reconocimiento del director general de Prensa, Tomás Cerro y se celebró una fiesta religiosa en la parroquia de San mateo. En 1958 pasó de 4 a 12 páginas y en 1964 recibió la visita del nuncio de Su Santidad en España, Antonio Riberi. El taller tipográfico de La Generala fue uno de los más avanzados de su época y llegó a albergar la rotoplana para la impresión del diario.