El uniforme de policía local no es apto para mujeres. Al menos eso parece en Extremadura, donde apenas 71 de los 1.315 agentes de este cuerpo son de sexo femenino, según los datos aportados ayer por la Federación de Servicios y Administraciones Públicas (FSAP) de Comisiones Obreras.

El problema, según denunció ayer este sindicato, radica en los requisitos mínimos que se exige para acceder a la policía local en la comunidad. Para el responsable de Policía Local de CCOO Extremadura, Moisés Cayetano, las exigencias que deben cumplir los aspirantes son "discriminatorias".

El aspecto más polémico es el de la estatura mínima, actualmente fijada en 1,70 metros para los hombres y 1,65 para las mujeres. El problema, según un estudio elaborado por FSAP, es que mientras el 74,1% de la población masculina supera ese umbral establecido, tan sólo el 39,1% de la población femenina lo consigue.

Un precedente

En la Policía Nacional ya se han rebajado las alturas mínimas hasta 1,70 para hombres y 1,60 para mujeres. En opinión de FSAP, en el caso de la policía local se debería pedir una estatura mínima de 1,68 para hombres y 1,58 para mujeres.

En cuanto a los permisos de conducir, actualmente es necesario disponer de los carnets A, B y BTP, "un impedimento para numerosos interesados, que deben realizar una importante inversión económica y dedicar un tiempo elevado a su obtención". Nuevamente, explica el sindicato, "la mujer sale perjudicada, pues son muchas menos las mujeres que disponen de estos permisos". Por eso, piden que sólo sea obligatorio el carnet B, mientras que el resto de los permisos se obtendrían en la Academia de Seguridad Pública.

En el caso de la edad, en estos momentos oscila entre 18 y los 31 años y FSAP reclama que la horquilla sea de entre 21 y 45 años, sobre todo porque se supone que se necesita "un grado de madurez importante" para usar armas de fuego.