Con unas menores previsiones de producción de aceite tanto nacionales como internacionales y con unas existencias limitadas, «los precios deberían ser buenos, en línea con los del año pasado», indica Antonio Prieto, responsable de Olivar de UPA-UCE. Actualmente, el kilo de aceite virgen extra se mueve sobre los 3,2 euros. «El precio no es que se vaya a disparar pero se debería mantener en los niveles razonables del año pasado», dice también Juan Metidieri, de Apag Extremadura Asaja.