Los supermercados de gran descuento o hard discount se han extendido como una mancha de aceite en Extremadura en los últimos años. Son ya cerca de 90 los establecimientos abiertos, que se caracterizan por una política de precios muy bajos --significativamente inferiores a los supermercados convencionales e hipermercados--, el fomento de las marcas propias y el ahorro de costes. Se trata del segmento que más ha crecido en la región en número de tiendas dentro del sector de la alimentación.

Dia, Lidl, y en menor medida Plus Supermercados y Aldi son los grupos que dominan en este terreno. Los cuatro suman 88 establecimientos de gran descuento en Extremadura, lo que supone la cuarta parte de las superficies de alimentación de la región asociadas a cadenas. Al igual que en España, Dia tiene abiertas 76 tiendas, de las que 25 son propias y 51 están explotadas en régimen de franquicia.

Dia es una filial del grupo francés Carrefour. Pero, ¿cómo es posible que estas tiendas puedan ofrecer los productos a tan bajo precio? Por un lado, en su surtido de productos --no muy amplio, dicho sea de paso-- dan prioridad a la marca propia. Se trata de artículos elaborados por otras empresas pero que llevan la marca de la cadena.

SIN GASTOS DE PUBLICIDAD

En el caso de Dia, combina las marcas propias con otras conocidas, aunque éstas últimas tienen menor presencia. En el caso de la cadena alemana Lidl, su surtido es casi exclusivo de marca propia. La ventaja que ofrece la comercialización de productos de marca menos conocidas es que la cadenas no soporta los gastos de publicidad y promociones. Otra razón que explica los bajos precios de los establecimientos hard discount es que éstos no destinan más recursos que los justos a limpieza y organización.

Llama la atención de estos establecimientos que los artículos están en cajas de cartón sobre palés de maderas y no en cuidadas estanterías como sucede, por ejemplo, en los supermercados de Mercadona o los hípers de Carrefour. A menudo, la clientela reprocha a las tiendas de gran descuento su apariencia de descuido, poca organización, surtido escaso, limpieza mejorable y demora en la reposición de los artículos. Y, sobre todo, que las cajeras cobren las bolsas de la compra.

El segundo operador más importante en Extremadura es la cadena alemana Lidl, que cuenta con 8 establecimientos, tras sus aperturas en Cáceres y Navalmoral de la Mata el pasado año. También es de origen germano el grupo Plus Supermercados, que tiene tres establecimientos en Almendralejo, Villafranca de los Barros y Badajoz. Esta cadena ha anunciado su interés en realizar al menos dos o tres aperturas más en el 2003.

Aldi, con un hard discount entre Don Benito y Villanueva de la Serena, es la cuarta cadena en importancia. Los extremeños Al Lado, de la empresa Líder Aliment, son un formato híbrido entre gran descuento e hipermercado.