La policía nacional desmanteló por primera vez en Extremadura una red dedicada a la prostitución masculina, según informó la Delegación del Gobierno. En esta actuación, denominada Operación Amazonia , fueron detenidos dos ciudadanos brasileños de 27 y 24 años como presuntos cabecillas de la red, y otros tres extranjeros --una rusa y dos brasileños-- al comprobarse que carecían de la documentación necesaria para permanecer en España. Otras cuatro personas fueron trasladadas a dependencias policiales para proceder a su identificación.
Según el relato de la operación facilitado desde la Delegación del Gobierno, la policía nacional sospechaba desde hace tiempo de la existencia en Badajoz de un grupo organizado dedicado a la prostitución masculina. Así, la investigación se centró en dos viviendas de la barriada pacense de Valdepasillas, donde se suponía que varias personas de distinto sexo ejercían la prostitución "ofreciendo servicios a los clientes de distintas orientaciones sexuales".
COACCIONES Y AMENAZAS La investigación experimentó un avance definitivo cuando un joven captado por esta organización abandonó uno de los pisos donde se ejercía la prostitución, a raíz de lo cuál "estaba siendo coaccionado y amenazado al objeto de que volviera y mantuviera silencio sobre las actividades que desarrollaban".
En ese momento se pidió al Juzgado de Instrucción de guardia una autorización para entrar en los domicilios sospechosos, donde se detuvo a los dos presuntos cabecillas por delitos contra los derechos de los extranjeros, contra los derechos de los trabajadores, relativos a la prostitución y por amenazas.
Posteriormente se ha podido determinar que desde hace un año los dos detenidos tenían alquiladas dos viviendas en Valdepasillas, en cada una de las cuales tenían trabajando a una mujer, un homosexual y un travestido, que eran rotados cada tres o cuatro semanas "para que los clientes tuvieran variedad". También se supo que traían a travestidos de Brasil, que por el viaje adquirían una deuda de 8.000 euros con la red.
Para captar clientes la organización utilizaba anuncios en la sección de contactos de los periódicos y también una página web donde se colgaban fotos de las personas que ejercían la prostitución en los dos pisos de Badajoz.
Además de las detenciones, en los registros la policía nacional intervino varios ordenadores personales, doce teléfonos móviles, 2.000 euros en efectivo, diversas agendas con datos que servirán para la investigación y varios reportajes fotográficos de personas dedicadas a la prostitución.
Los detenidos han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción de Badajoz.
Aunque se trata de la primera operación en la región contra una red de prostitución que tuviese entre sus víctimas a hombres, no es, por supuesto la primera actuación contra este tipo de organizaciones, si bien hasta ahora en todos los casos se trataba de clubs dedicados a la prostitución femenina. De hecho, sólo el pasado año la Guardia Civil realizó 140 intervenciones de este tipo en el aproximadamente medio centenar de clubs de alterne que las fuerzas de seguridad tiene localizados en toda Extremadura, según consta en los informes sobre trata de seres humanos.
