La operación de la Policía Nacional en la que ha quedado desmantelada una red dedicada al contrabando de bienes culturales entre España y Portugal, y al tráfico ilícito de armas de fuego antiguas y actuales --en perfecto estado de mantenimiento--, se ha saldado con la recuperación de "miles de piezas" de alto valor, entre ellas una vasija del año 1500 antes de Cristo (a.C.).

Según recoge la agencia Europa Press, el jefe Superior de la Policía Nacional en Extremadura, Ángel Galán, detalla que la operación se inició hace seis meses en Madrid y se han recupreado piezas de vidrios y cerámicas de la época romana, relieves visigóticos, retablos, esculturas religiosas y objetos de bronce de los siglos XV, XVI y XVII, que se creen proceden de Portugal como las piezas de marfil, junto a muebles de época, 25 pistolas y 11 armas largas, siendo la pieza más antigua una vasija del año 1500 a.C., unas piezas culturales e históricas que Galán describe como de "incalculable valor" y alguna de ellas "irreemplazables".

Hay 12 personas implicadas, de las que cinco están detenidas y han pasado a disposición judicial esta mañana, y otras siete más están imputadas. Todos los implicados son de la zona extremeña de la investigación, principalmente en Fregenal de la Sierra, excepto uno que procede de Huelva.

Además, fruto de la investigación se han practicado 30 registros en distintas localidades de Badajoz, Huelva, León y Málaga, en distintas viviendas y locales donde se almacenaban los objetos incautados que están siendo estudiados y analizados por expertos del Museo Arqueológico de Badajoz, para determinar su valor, época y lugar de procedencia.

Se trata de la operación de este tipo "más importante y mayor intervención de piezas de arte que ha habido en España en los últimos tiempos sin duda ninguna", por la cantidad de objetos recuperados, que el jefe de la UDEV, Serafín Castro, ha visto en sus más de 30 años de carrera, una operación en la que se ha facilitado a la policía portuguesa toda la información obtenida para que lleven en Portugal la parte que les corresponde.

La investigación ha sido desarrollada por agentes de la Brigada de Patrimonio Histórico de la UDEV de la Central de la Comisaría General de la Policía Judicial; la Brigada de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Extremadura; junto a las comisarías provinciales de Málaga y León y de Marbella. Además en los registros han participado arqueólogos de la Junta de Extremadura y de Castilla y León.

Los detalles

El jefe de la UDEV matiza que la operación se inicia "a raíz de un escrito anónimo" que llega a la UDEV, un texto del que se desconoce la procedencia y que daba detalles sobre "apodos" y unas ciudades, datos desde los que se parte contando con la colaboración de la Jefatura Superior de Extremadura, para avanzar en la investigación.

La red desarticulada, compuesta por ciudadanos españoles y lusos, utilizaba en sus operaciones camiones de pequeño y mediano tonelaje para llevar a cabo el intercambio de los bienes expoliados entre los responsables de los dos países.

La compra-venta de objetos se producía en localidades fronterizas de la provincia de Badajoz y posteriormente quedaban almacenadas en esas zonas o se trasladaban a otros puntos de España para ser vendidas o guardadas en espera de un posible comprador.

Para comprobar con seguridad el origen de las piezas intervenidas se está llevando a cabo un estudio pormenorizado para determinar su procedencia y saber si se trata de objetos expoliados en yacimientos, adquiridas ilícitamente o bien robadas.

En este sentido, Castro subraya que se ha pedido a las autoridades lusas el cotejo de objetos para conocer si se trata de piezas procedentes de hechos delictivos cometidos en Portugal, sobre todo en referencia a los retablos, esculturas y piezas de carácter religioso intervenidas.

Unos de los arrestados en esta operación acaparaba la mayoría de las piezas intervenidas en múltiples propiedades que posee en las provincias de Badajoz, León y en Marbella, una persona que estaba llevando a cabo una importantísima inversión en bienes culturales aprovechando el descenso de los precios y revenderlos con posterioridad cuando se recupere el mercado, señaló el jefe de la UDEV.

Expolio en Extremadura

Además de dedicarse al contrabando de armas y bienes culturales, la Policía Nacional investiga la participación de la red en expolios llevados a cabo en la campiña extremeña, con el objetivo de localizar un yacimiento, posiblemente funerario, en que presuntamente realizaban este tipo de actos.

Durante los registros se han localizado detectores de metales que eran usados para localizar este tipo de vestigios, unas actuaciones que causan daños irreparables ya que, a partir de su consumación, los estudios que deberían realizarse siguiendo métodos arqueológicos resultan desvirtuados, puesto que al no realizarse bajo técnicas científicas se dificulta la concreción de las civilizaciones asentadas en los lugares expoliados a las que pertenecen.

Ángel Galán destaca la "importancia" del operativo puesto en marcha por la Policía Nacional ya que la región es uno de los sitios con un "patrimonio histórico más importante" con rastros romanos, visigodos o árabes.