Los trenes de pasajeros dejarán de circular por la línea férrea que comunica el centro de Portugal con Elvas y Badajoz. Lo harán a partir del próximo 1 de enero. Comboios do Portugal (CP), la empresa pública que gestiona el transporte ferroviario en el país vecino, ha confirmado esta decisión y el cierre de otros tres tramos más en el norte y el sur. Entre los afectados no se encuentra el Ramal de Cáceres, por el que circula el Tren Hotel Lusitania. De momento mantiene su doble servicio diario entre Madrid y Lisboa a través de Extremadura a la espera de una decisión definitiva sobre su futuro.

CP justifica el cierre de la línea de Leste (Abrantes-Elvas/Badajoz) por la baja demanda de usuarios y su insostenibilidad económica. "Esta decisión es resultado del reducido número de pasajeros que existe en este servicio, presentándose la solución por carretera como la más adecuada para garantizar la movilidad regional", explica la compañía. Según sus datos, el coste anual del trazado ronda los 1,78 millones de euros, mientras que los ingresos apenas llegan a los 147.000 euros. Los trenes que circulan por esta vía tienen una media de 17 pasajeros.

La línea de Leste discurre desde la localidad de Abrantes, en el centro de Portugal, hasta la frontera extremeña a la altura de Elvas y Badajoz. En total son 140 kilómetros por los que circulan trenes regionales lusos (no hay tráfico de pasajeros entre los dos países a través de esta conexión ferroviaria) y de mercancías. Estos últimos, en principio, no se ven afectados por la medida, de acuerdo con los planes del Gobierno portugués.

El resto de líneas ferroviarias que se quedan sin servicio a partir del 1 de enero son: la de Beja-Funcheira (en el sur), las de Tamega y Corgo, y el ramal de Figueira da Foz (en la zona norte). Todas ellas estaban incluidas en el listado inicial que manejaba el Ministerio de Economía luso, que en octubre presentó un Plan Estratégico de Transportes en el que se contemplaba el cierre de 600 kilómetros de red férrea.

La medida también iba a afectar inicialmente al Ramal de Cáceres, según la información del Plan de Transporte que trascendió hace dos meses. Por esta vía, que une el centro de Portugal con Extremadura a través de Valencia de Alcántara, solo circula un tren de pasajeros actualmente, el Lusitania, con dos servicios diarios entre Madrid y Lisboa. El cierre de este ramal obligaba, por tanto, a desviar su circulación por otro punto fronterizo (como Salamanca), dejando sin uso el tramo español entre Cáceres y Valencia de Alcántara. Sin embargo, el país vecino está replanteándose esta decisión, según la prensa portuguesa y no está claro que el Lusitania vaya a dejar de pasar por tierras extremeñas. No obstante, el Gobierno luso no dice nada sobre su futuro, pese a las reiteradas solicitudes de información de este diario. Y en España, el Ministerio de Fomento y Renfe aseguran no tener conocimiento de cambios respecto a este tren.