El Partido Popular (PP) denunció ayer la "pasividad" del Gobierno español y su falta de una estrategia clara en la negociación del próximo marco presupuestario de la UE (2007-2013), lo que pone en peligro la recepción de fondos comunitarios. Extremadura es una de las regiones españolas más beneficiadas actualmente por este reparto.
Para el eurodiputado de ese partido Gerardo Galeote, esa "pasividad" está produciendo gran "extrañeza" a sus socios comunitarios, que estaban acostumbrados a que el anterior gabinete batallara siempre en favor de los intereses de España y de los otros países (Portugal y Grecia) que reciben el fondo de cohesión.
Ante la decisión que los 25 deberán adoptar previsiblemente al final de la Presidencia luxemburguesa de la UE (enero a junio) sobre las perspectivas financieras de la Unión, el PP celebrará la próxima semana un acto público en el que defenderá una estrategia, que también hará llegar al Gobierno español.
Los populares consideran que es necesario no retrasar un acuerdo más allá de junio de 2005 para no perjudicar los intereses de España.
Galeote denunció que España es el país de la UE más perjudicado por la reciente ampliación, pues dejaría de recibir 60.353 millones de euros entre 2007 y 2013 si prospera la propuesta de los seis contribuyentes netos (Suecia, Alemania, Francia, Reino Unido, Austria y Holanda). Esta iniciativa quiere rebajar al 1% de la Renta Nacional Bruta (RNB) el techo de recursos a disposición del presupuesto común.
