La portavoz del PP-EU en la Asamblea de Extremadura en temas de Dependencia, Cristina Herrera, contabiliza 9.600 personas las que esperan recibir servicios de a la Ley de Dependencia, de manera que unas 3.578 están en lista de espera para ingresar en una residencia, 588 en lista de reserva, y otras 5.500 para recibir ayuda a domicilio.

Según recoge la agencia Europa Press, Herrera anuncia que el jueves su grupo presentara una iniciativa en la Asamblea de Extremadura para "instar a la Junta a que elimine cuanto antes la lista de espera tanto de ayuda a domicilio como de ingreso en una residencia".

Por provincias, en Cáceres existen 1.798 expedientes en listas de espera para ingresar en una residencia y 273 personas en reserva, mientras que en Badajoz, las cifras se sitúan en 1.780 y 315, respectivamente. Para recibir ayuda a domicilio en la provincia de Cáceres hay 2.500 personas en la lista y en la pacense, unas 3.000.

Según los datos manejados por Herrera, que corresponden a cifras hasta el 15 de abril de este año, en Extremadura unas 28.000 personas han solicitado acogerse a ayudas de la Ley de Dependencia, de las que 6.700 "todavía" no ha sido baremado su grado de discapacidad y más del 30% que sí han sido valoradas están a la espera de recibir el servicio que han solicitado.

Por todo ello, califica la gestión de la Consejería de Sanidad y Dependencia de la aplicación de la Ley de Dependencia de "estafa política" porque "a día de hoy se tarda más de un año desde que se solicita la baremación hasta que la Junta pone en marcha los catálogos de servicio".

Herrera se lamenta también del funcionamiento del nuevo organismo que se creó en octubre del año pasado desde el Gobierno regional para gestionar toda la aplicación de la ley, el llamado Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (SEPAD), por entender que "a día de hoy hay mucho más retraso y más dejación" en la aplicación de los servicios.

La portavoz popular critica además que la puesta en marcha de este nuevo organismo ha supuesto la creación de dos nuevas direcciones generales y de más de una decena de cargos de libre disposición por lo que el gasto de personal ha aumentado mientras que no se incrementa el personal técnico para paliar la listas de espera ya que "hay escasez de equipos de baremación".