El presidente extremeño del PP, José Antonio Monago, ha dicho hoy que se manifestarán el sábado día 28 en Mérida para secundar la protesta que ha convocado la plataforma Stop Sucesiones para exigir a la Junta que derogue ese impuesto, que afecta a unas 20.000 personas al año.

Así lo ha señalado hoy Monago en Mérida, en una rueda de prensa en la que ha dicho que se suman así, incluida la directiva regional, a la iniciativa de la plataforma, que reclama al Gobierno regional que establezca una bonificación regional del 99,9 por ciento en el impuesto estatal de sucesiones y donaciones para transmisiones entre herederos directos.

Monago ha subrayado que "nadie trabaja toda su vida para que le herede la Junta" y que miles de extremeños deben al año renunciar a sus herencias porque no pueden pagar ese impuesto, a lo que ha agregado que en la comunidad autónoma no existe esa cifra de personas "ricas".

La gran mayoría de los extremeños, ha continuado, forman parte de la clase media, son agricultores y otro tipo de trabajadores, y que en 2016 unos 800 tuvieron que renunciar a sus herencias por no poder pagarlo.

Ha añadido que, además, al multiplicarse por tres o cuatro veces las cargas catastrales las dificultades para los herederos se agravan.

Monago ha aseverado que el mantenimiento de ese impuesto es injustificable ya que su supresión en la comunidad autónoma es posible a causa de la mejoría de la situación económica, sobre lo que resaltado que hay unos 100 millones de euros disponibles, provenientes de las liquidaciones positivas del Estado, para rebajar la presión fiscal.

También ha señalado el dirigente popular que 5.000 extremeños han trasladado su sede fiscal a Madrid para evitar esos pagos.

Monago ha explicado, asimismo, que durante las negociaciones e los presupuestos PSOE y Podemos se han unido para "sablear" a los extremeños pero que los socialistas "no lo tienen claro" ya que, ha señalado, numeroso municipios gobernados por ellos han aprobado mociones del PP para pedir el fin del impuesto.

Según él, el presidente regional, Guillermo Fernández Vara, "tiene levantada a Extremadura contra este impuesto y tiene que atender el clamor de la calle".

Por contra, ha continuado, se escuda en el argumento de que los impuestos sirven para financiar la sanidad pero ha dicho que todos vana a "una caja única" con la que se financian todos los servicios.