El primer episodio del debate presupuestario transcurrió ayer por cauces poco habituales. Y es que el presidente del Partido Popular, Carlos Floriano, ofreció a la Junta y al PSOE la retirada de la enmienda a la totalidad presentada por su partido al proyecto de presupuestos a cambio de que el Ejecutivo negocie con los populares una rebaja fiscal que podría alcanzar los 100 millones de euros.

La propuesta fue rechazada por la Junta --a través del consejero de Administración Pública y Hacienda, Angel Franco-- y por el PSOE, aunque a cambio se abrió la puerta a la posible negociación en los próximos días de las enmiendas parciales.

En la sesión plenaria de ayer Franco presentó el proyecto presupuestario del Gobierno extremeño. Un documento que, según explicó, destaca porque ya incluye buena parte de los compromisos electorales del PSOE en las últimas elecciones, recoge lo "esencial" de la política social y económica de los últimos años y "no limita su alcance a la presente legislatura".

El titular de Administración Pública y Hacienda defendió la gestión económica desarrollada por la Junta porque, afirmó, "Extremadura está siendo capaz de converger con las regiones más prósperas".

Por su parte, Carlos Floriano, que subió al atril --sin la ayuda de papeles-- a defender la enmienda a la totalidad presentada por el PP al presupuesto extremeño, sorprendió ofreciendo al PSOE y a la Junta de Extremadura un pacto novedoso.

LA OFERTA POPULAR En concreto, el líder popular se comprometió a retirar esta enmienda a cambio de negociar, a través de las enmiendas parciales, una rebaja fiscal de hasta 100 millones de euros. "Esa sería la mejor contribución que nosotros podemos hacer para las familias extremeñas", algo especialmente importante, recalcó, en un momento en el que la economía familiar pasa por un mal trance mientras la comunidad está --según todos los estudios-- entre las que ejerce una mayor presión fiscal.

Sin embargo, y a pesar de que Angel Franco agradeció el "gesto" de los populares, la oferta fue rechazada. El responsable de la política presupuestaria del Ejecutivo regional dejó claro, en primer lugar, que la política fiscal de la Junta"no va por la reducción de los impuestos, sino por incrementar las políticas de gastos". Son dos modelos distintos, indicó Franco, y "los ciudadanos han sancionado de forma clara y rotunda las distintas políticas".

FUERA DE TIEMPO Y FORMA En su segunda intervención Angel Franco añadió que la propuesta de Floriano "no es posible en este trámite" porque llega tarde y únicamente podría aplicarse a través de la retirada del proyecto presupuestario.

Esto supondría, apostilló, "una bajada de pantalones del Gobierno, que tiene que retirar el proyecto de ley que lleva 4 meses preparando". También criticó al PP que "despache este trámite de la ley seguramente más importante del año con una última ocurrencia".

Pese a todo, el consejero de Administración Pública y Hacienda realizó a los populares una contraoferta . "Retiren la enmienda a la totalidad y en el trámite que queda intentamos llegar a acuerdos en algún ámbito", ofreció.

El portavoz parlamentario del PSOE, Francisco Fuentes, reprochó a Floriano que no tenga "nada que decir sobre el destino de los 5.500 millones que suponen los presupuestos".

Finalmente la enmienda a la totalidad del PP fue votada y rechazada por la mayoría socialista. Así, los presupuestos regionales siguen su trámite y serán aprobados definitivamente el 21 de diciembre.