Los grupos políticos con representación en el Parlamento extremeño (PP, PSOE e IU) han abogado hoy por reinvertir en la región los 12 millones de euros que el Grupo Gallardo tiene que devolver al Gobierno regional por su aportación al proyecto fallido de la Refinería Balboa.
La Administración autonómica ha anunciado hoy que ha llegado a un acuerdo con esta empresa para que se devuelva al Ejecutivo extremeño su participación en el proyecto, para lo que contará con un plazo de 12 años.
El portavoz del grupo parlamentario popular, Miguel Cantero, ha señalado que lo que ha hecho el Gobierno de Extremadura es cumplir con lo que prometió a los ciudadanos de la región y ha subrayado que es una "lástima" que no se hubiera realizado lo mismo con casos como Montprint y Luxográficas.
Cantero ha mostrado la satisfacción por el acuerdo logrado y ha reiterado el "compromiso firme" con los extremeños del Gobierno autonómico, que ha conseguido que el dinero que en su momento salió se "devuelva y se revierta en los intereses generales y comunes" de todos los ciudadanos
Por su parte, el portavoz del grupo parlamentario socialista, Valentín García, ha apuntado que el acuerdo para la devolución "cómoda" de esos fondos, para "no poner en riesgo" al Grupo Gallardo porque genera "mucho empleo" en la región, y que Extremadura recupere el dinero le parece "adecuado y normal".
De este modo, ha explicado que ahora Avante recibirá el dinero que invirtió en el capital social de la Refinería Balboa, al tiempo que ha instado a esta entidad pública a que vuelva a invertir los fondos que recibirá en otras empresas de la región.
"Ya nos hubiera gustado que no hubiera tenido que devolverlo porque ello significaría que se hubiese puesto en marcha la refinería y hoy estaríamos hablando de miles de puestos de trabajo", ha sentenciado García
El portavoz de IU-Verdes-SIEX en la Cámara regional, Pedro Escobar, ha mostrado su alegría porque se haya llegado a este acuerdo, al tiempo que ha lamentado que los fondos se devuelvan "con cuenta gotas" porque ello "impide" destinar "cantidades importantes" a políticas sociales.
No obstante, ha destacado que conoce las "dificultades" que tiene el Grupo Gallardo y que por ello no quiere "desvestir a un santo para vestir a otro" y que la devolución del dinero le provoque más problemas de los que "ya tienen" sus empresas.
