El nuevo modelo de financiación de las autonomías y la publicación de las balanzas fiscales sigue enfrentando al PP y al PSOE en Extremadura. En el último intercambio de declaraciones, el secretario regional del PP, César Díez Solís, dijo ayer que es "un síntoma claro del desbarajuste socialista" el hecho de que el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, apoye reunirse solo las regiones gobernadas por el PSOE para analizar la financiación autonómica y ha pedido que "hable en nombre de todos los extremeños y no solo del PSOE". El PSOE de Extremadura solicitó, en respuesta a los populares, al presidente del PP, Mariano Rajoy, que se manifieste en contra de la publicación de las balanzas fiscales y le ha exigido que unifique su postura en torno a este asunto porque, a su juicio, defiende un discurso distinto en cada autonomía.

Para Díez Solís, "los primeros que tienen que arreglarse son ellos, que no se ponen de acuerdo ni saben cómo pararles los pies a sus correligionarios de Cataluña", al margen de que "habrá que contar con las regiones que no gobierna el PSOE para enmendar un desaguisado en el que nos metió, a todos, el presidente del Gobierno".

Díez Solís ha calificado como "un escándalo y una vergüenza" que "las tensiones internas del PSOE hayan situado a España en un callejón sin salida y a Extremadura especialmente en una situación muy delicada en materia de financiación autonómica".

En este sentido critica que el PSOE "diga una cosa aquí, otra en Cataluña, que diga la contraria en el Gobierno de Andalucía, otra distinta en el Gobierno de Castilla- La Mancha y otra distinta en el Gobierno balear".

Por su parte, los socialistas extremeños indican que el PP es capaz de sostener una posición en Extremadura y reunirse en la Comunidad Autónoma de Valencia con el consejero de Hacienda de la Generalitat catalana para reclamar 1.000 millones de euros más para esta comunidad.

Afirman que así sucedió en julio tras la publicación de las balanzas fiscales en una reunión entre el titular de Hacienda de la Comunidad Valenciana, Gerardo Camps, y el de Cataluña, Antoni Castells.

Además el PSOE reitera que la defensa de los intereses extremeños "precisamente no ha sido la bandera del secretario general del PP de Extremadura durante los últimos días".

En este sentido, alega que antes de certificar el Gobierno de España determinadas informaciones que venían del Levante español sobre un hipotético trasvase desde la cuenca del Tajo al Segura, ya solicitó a la Junta de Extremadura que se reuniera en una mesa de negociación.

"Díez Solís llegó a afirmar que estaban abiertos a negociar incluso compensaciones al respecto", subraya el PSOE, que considera que las declaraciones del dirigente es un nuevo capítulo en el que oculta a la opinión pública extremeña "el frente mediterráneo del que participa la Generalitat Valenciana gobernada por el PP".