El diputado popular Francisco Ramírez ha recordado hoy que el PSOE votó en contra de dos enmiendas del PP a los presupuestos extremeños de 2016 de apoyo a la minería y ha reclamado un plan de dinamización económica para la zona de la explotación de Aguablanca.

Ramírez ha expuesto que el PP propuso un Plan Estratégico de la Minería con vocación plurianual, que en 2016, su primer ejercicio, contaría con 100.000 euros.

Además, defendió una segunda enmienda para seguridad y salud laboral en la minería extremeña, de 75.000 euros, para igualar la dotación que se presupuestó para el ejercicio de 2015 durante el Gobierno del PP, ya que había sufrido un "tijeretazo" del 50 por ciento.

En vez de asumir su responsabilidad apoyando esas enmiendas, los socialistas "se escudan" en Madrid y mañana defenderán en la Asamblea una propuesta de pronunciamiento que insta al Gobierno de España a la aprobación inmediata de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de la mina de Aguablanca con el fin de mantener la actividad y el empleo.

Es decir, ha precisado el parlamentario, presentan una propuesta "técnica" para echar como siempre la "culpa" al Gobierno del PP y eludir su responsabilidad "política" y dejar "tiradas" a las familias de la mina de Monesterio (Badajoz).

En este sentido, ha recordado que si la declaración fuera una cuestión política y no técnica, los socialistas, que gobernaban entonces en España y en las autonomías de Extremadura y Andalucía, hubieran sacado adelante la DIA de la refinería Balboa, que luego resolvió el Ejecutivo del PP.

Ramírez ha advertido también de que cuando algunos alcaldes socialistas se han metido "a técnicos" han sido condenados por prevaricación.

El PP, ha anunciado, exigirá a la Junta de Extremadura un plan alternativo económico para la zona de la mina de níquel de Aguablanca, ya que el yacimiento solo tiene recursos para tres años, según han comentado los trabajadores.