El secretario general del PP de Extremadura, Fernando Manzano, ha dicho hoy que el presidente regional, Guillermo Fernández Vara, "se ríe a carcajadas" de los extremeños ya que afirma que la obra de la carretera N-110 se va a acometer, pero sin precisar cuándo ni con qué inversión. Según ha recogido la agencia EFE, así lo ha afirmado hoy en Mérida el dirigente popular, donde ha analizado diversas cuestiones de actualidad, entre ellas el hecho de que ayer Fernández Vara dijera ayer que esa infraestructura se va a construir porque así se ha comprometido el Ministerio de Fomento. Para Manzano, "no hay compromisos ni de presupuestos ni de plazos" sino que se limita a "vender botes de humo" y a hacer afirmaciones que "suenan al son del AVE de 2004", cuando, ha agregado, el PSOE afirmó que las obras se paralizarían con el fin de avanzar luego con más fuerza en el futuro. Finalmente, ha añadido, la línea del tren de alta velocidad Lisboa-Madrid aún no se ha construido aún. Por otro lado, acerca de la posible subida de impuestos por parte del Gobierno, Manzano ha reclamado al PSOE extremeño que diga a quién apoya, si al ministro de Fomento, José Blanco, que apuntó esta posibilidad, o a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, que descartó el incremento para el año que viene por considerar que los ingresos previstos son suficientes. Según el dirigente popular, el secretario regional socialista, Guillermo Fernández Vara, debe "aclarar" la postura de su partido en la región y dejar de "ser un palmero de José Luis Rodríguez Zapatero". También ha reclamado que diga a qué se destinarían los recursos que se obtuvieran por esa subida, si a financiar el AVE de Cantabria o a los departamentos "ineficaces" del Gobierno y las administraciones autonómicas, a pagar a los altos cargos y a "un nuevo donativo a Cataluña". En su opinión, Fernández Vara "no defiende los intereses de Extremadura sino que está en la defensa de los de su partido". Asimismo, se ha referido a la situación en Melilla y ha manifestado la "solidaridad y apoyo" de su partido a los melillenses ante "el conflicto y el embargo" a la llegada de productos procedentes de Marruecos, así con a las mujeres miembros de las fuerzas de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que "son vejadas e insultadas".