Marzo abrió la puerta a la deflación y abril, pese al fin de las rebajas, no la ha cerrado. El mes pasado los precios subieron un 1,1% en Extremadura, una décima más que a nivel nacional, fundamentalmente, como es habitual, por el inicio de la temporada de primavera-verano en el sector textil, pero la tasa interanual mantiene una caída porcentual de cuatro décimas, dos más que a nivel nacional. De este modo, se mantiene el temor a los efectos perversos que puede tener el estancamiento del consumo por la actual crisis, si bien la Junta trató ayer de espantar ese fantasma en un comunicado en el que afirma que su previsión es que "la inflación interanual registre signos positivos en los próximos meses".

Lo cierto es que el Indice de Precios al Consumo (IPC) se ha reducido un 0,4% en abril con respecto al mismo mes del año pasado en Extremadura, según los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que supone "la tasa más baja de toda la serie histórica del IPC" --según reconoce la nota del Gobierno regional-- y una caída dos décimas mayor que la de marzo. En el conjunto del país, la tasa interanual cae un 0,2%, fundamentalmente por los descensos de la vivienda y los transporte de acuerdo con la información que aporta el INE.

No obstante, con respecto al mes anterior los precios suben tanto en la región (un 1,1%), como en el conjunto del país (1%). Como suele ocurrir todos los meses de abril, estos aumentos se deben fundamentalmente al fin de las rebajas, siendo el área de vestido y calzado la que registra la mayor subida, especialmente en Extremadura (12,1% frente al 9,4% nacional), lo que contribuiría a explicar por qué la subida global del IPC en la comunidad es una décima superior a la media nacional.

VALORACIONES A pesar de esta subida, la Junta de Extremadura destaca en su comunicado la reducción del índice general, que vincula sobre todo a la caída de los precios del transporte en el último año (-8,1%). No obstante, el Gobierno regional hace una lectura positiva de estos datos y asegura que "teniendo en cuenta la variación del IPC en lo que va de año, -0,1%, y los signos de dinamización progresiva que se notan en los mercados, es más que probable que en los próximos meses la inflación interanual empiece a registrar signos positivos, alejando, definitivamente, la posibilidad de deflación en la economía extremeña".

En esta línea, UGT Extremadura descarta "cualquier temor deflacionista" fijándose en su caso en la subida mensual del IPC y centrándose en instar, como CCOO, a mantener el poder adquisitivo de los trabajadores para evitar un estancamiento del consumo. En concreto, la receta de UGT para "estimular la demanda y reactivar la economía", pasa por la "garantía y mejora de los salarios" unida a la "mayor disposición de cajas y bancos para dar liquidez al mercado y facilitar los créditos a empresas, autónomos y familias".

Por su parte, teniendo también en cuenta el incremento de los precios registrado en Extremadura en abril con respecto al mes anterior, CCOO considera "una necesidad" "mantener el poder adquisitivo de los trabajadores para poder reactivar el consumo y la economía". Pero, por otro lado, este sindicato también se fija en la mayor caída interanual de los precios registrada en Extremadura (-0,4%) que en España (-0,2%), que prevé que puede mantenerse en los próximos meses, por haber sido el comportamiento de los precios más inflacionista en la región que en el conjunto del país.