El Indice de Precios al Consumo (IPC) subió en marzo siete décimas en Extremadura con respecto al mes de febrero, el mismo incremento que se registró en el conjunto nacional, con lo que ya son cinco los meses consecutivos en los que el IPC se encuentra en tasas positivas, tras una racha de ocho meses en negativo.

En tasa interanual, los precios subieron un 1,3% en marzo en la región con respecto al mismo mes del año anterior, según informó el Instituto Nacional de Estadística.

En el conjunto nacional, la tasa interanual se sitúa en el 1,4%, seis décimas superior a la de febrero. Con ello, la de marzo es la tasa más elevada desde diciembre del 2008.

En cuanto a la variación por sectores, en Extremadura el que registró un mayor incremento de sus precios en marzo fue el de vestido y calzado. Las bebidas alcohólicas y el tabaco mantuvieron sus precios estables, mientras que tres sectores registraron un descenso de sus precios: alimentos y bebidas no alcohólicas, menaje y medicina.

El INE atribuya la variación interanual de la inflación a la subida de los precios de los carburantes, frente al descenso que registraron en marzo del 2009, así como al incremento que han experimentado este año los precios de la alimentación, especialmente el pescado fresco, la carne de ave y los crustáceos y moluscos.

La patronal considera que los precios "se están conteniendo" por el esfuerzo que hacen las empresas por adecuarse a una demanda interna "muy debilitada". La organización empresarial cree que el repunte se debe "casi en su totalidad" al efecto del precio del petróleo y que de no ser por este factor se mantendría en niveles cercanos a cero, tal y como refleja la inflación subyacente, que se situó en el 0,2%.

CCOO de Extremadura lamenta que la subida del IPC "no se deba a una recuperación sólida de la economía", sino que "se enmarque dentro de una situación puntual de incremento de los precios con el comienzo de la temporada comercial y el alza de los precios de la energía". A su juicio, el "esfuerzo" de contención salarial que hacen los trabajadores, "debe ser correspondido con una apuesta firme por la recuperación del empleo y la mejora de la calidad de los productos".

Por su parte, UGT incide en que el crecimiento de los salarios es un factor clave para la recuperación del consumo y la confianza. Para este sindicato, el consumo aún no se ha recuperado totalmente, por lo que entiende que el crecimiento de los salarios de los trabajadores es un factor clave para lograr que el consumo se recupere.