El presidente ejecutivo de Caja Extremadura, Víctor Bravo, califica de "muy positivo" el balance financiero del tercer trimestre de 2010 en el que la entidad ha alcanzado un beneficio bruto de 42,8 millones de euros, "un dato que indica que hemos estado muy por encima de la media nacional".

Bravo subraya que estas cifras llenan de satisfacción "sobre todo porque se ha realizado una aportación muy significativa para hacer la caja más solvente y tener más recursos para hacer frente a posibles contingencias que se puedan producir".

La entidad financiera extremeña ha destinado en este sentido más del 50 por ciento de sus beneficios a fortalecer sus fondos de riesgos, "para hacer más fuertes nuestras reservas y aún así los resultados son más que satisfactorios", destaca el presidente ejecutivo. "No podemos obviar que el comportamiento de Caja Extremadura sido muy importante en estos primeros nueve meses de 2010, en un contexto económico muy adverso".

Respecto a las denuncias realizadas por asociaciones de consumidores, en relación a las comisiones que cobran bancos y cajas, destaca que la entidad que preside "no tiene más remedio que adaptarse a la realidad del mercado".

En este sentido, añade que por eso "se dan los pasos que dan, abiertos a realizar cualquier operación que pueda permitir que Caja Extremadura pueda seguir devolviendo a la sociedad, por medio de su Obra Social, parte de sus beneficios".