El consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, aseguró ayer que durante el próximo verano no cerrará «ningún punto de urgencia» que forme parte del Servicio Extremeño de Salud (SES). «De lo que pueden estar tranquilos los extremeños es que si se para algo, será exclusivamente lo que puede ser la actividad programada», manifestó el consejero, quien añadió que tampoco se va a cerrar «ningún punto que tenga que ver con una situación absolutamente crítica».

En esta línea, el consejero afirmó que los centros sanitarios permanecerán abiertos y que la cartera de servicios de los hospitales «se seguirá manteniendo». «La situación no va a ser diferente a la de otros años», recalcó Vergeles a preguntas de los periodistas, al tiempo que señaló que la Administración extremeña ya se ha «esforzado» de cara a controlar la atención sanitaria durante los meses estivales. Sobre este punto, el consejero recordó que el SES tiene una previsión de cubrir el 65% de las plazas de Atención Primaria, aunque reconoció que en algunos municipios es «difícil» encontrar sustitutos, sobre todo en médicos de familia y pediatras.

En relación a la gestión que se llevará a cabo en aquellas poblaciones que aumentan considerablemente sus habitantes durante el verano frente a otras épocas del año, como en la zona de La Vera, Vergeles avanzó que se van a reforzar los servicios. «Habrá pueblos donde reforcemos con puntos de atención continuada y reforcemos el horario de mañana», subrayó.

Entre otras cuestiones, el consejero apuntó que el cierre de plantas en los centros sanitarios será «igual que en otros veranos», ya que la actividad disminuye en verano, y «no solo se toman vacaciones los profesionales, sino también los pacientes». «Hay determinadas circunstancias que nos permiten reajustar las plantillas para que durante ese tiempo, si hay alguna planta que necesita ser remodelada o acondicionada, lo podamos hacer con mayores posibilidades», puntualizó Vergeles.