A las 8.30 de mañana está previsto que aterrice en la Base Aérea de Talavera un avión con el primer grupo de soldados de la Agrupación Plus Ultra II --constituida en torno a la Brigada Extremadura XI, de Bótoa, Badajoz--, procedente de Irak y Kuwait, hasta donde tienen llegar por carretera con estrictas medidas de seguridad. Los demás vuelos serán los días 20, 24 y 28 a la misma hora, con más de 200 personas cada uno hasta completar las casi 1.300 que partieron hace cuatro meses.

El ánimo, según el teniente coronel Novelles es "bueno", pese a la tensión de las dos últimas semanas y de los ataques sufridos en los últimos días contra la población civil y militar. En el último atentado resultaron heridos tres miembros de la brigada, dos de ellos extremeños. Según Novelles, "la gente está bien, terminando la misión y concentrada", informa Europa Press.

OCHO HERIDOS En estos cuatro meses, la tropa ha sufrido ataques que le han causado ocho heridos --cinco extremeños--, cinco hace dos meses y tres en el último, uno de los cuales permanece convalenciente por la pérdida de visión en un ojo. En ambos casos fueron atacados con granadas en misiones de patrulla: el primero cuando investigaba una venta ilegal de armas, y el segundo patrullando en un vehículo. Y en ambos se salvaron por su reacción.

El contingente español en Irak partió de la Base Aérea de Talavera a mediados de diciembre pasado, mandado por el general jefe de la Brigada Extremadura XI, Fulgencio Coll, que estará al frente de la agrupación Plus Ultra II hasta su relevo por legionarios de Almería el 23 de abril.

Los militares españoles, casi 1.300, de los que 700 son de Bótoa y el resto de otras unidades de la División Brunete esparcidas por Burgos, Valladolid, Madrid o Córdoba, se encontraban en misión de vigilancia, formación y reconstrucción en la zona centro-sur de Irak, con sede en Diwaniya y Nayaf, hasta los últimos ataques, perpetrados en un ambiente de levantamiento en todo el país, lo que les obligó a permanecer acuartelados.

PREPARADOS PARA OTRA COSA Fuentes militares han reconocido que la agrupación no se había preparado para hacer frente a una guerrilla y el propio jefe de la división, general Alamán, reconoció la preocupación por el agravamiento de la situación.

La Brigada Extremadura XI ha sido la única española con dos misiones internacionales de envergadura a la vez, la de Irak y la de Kosovo, de donde acaban de volver los 646 miembros que han permanecido en Istok seis meses, en misión de paz bajo mando de Naciones Unidas. Así, de los 604 mandos y 1.779 soldados de Bótoa, la base se quedó con los imprescindibles para su mantenimiento y defensa.