La segunda edición de los Premios Espiga de Cava de Almendralejo que convoca Caja Rural de Extremadura tuvo ayer un indiscutible ganador: Bodegas Romale. La industria no sólo se hacía por segundo año consecutivo con el Gran Espiga, sino que, además, atesoraba otros tres galardones en las diferentes categorías. Diego Nieto, gerente de la bodega, recordó emocionado que era el segundo año consecutivo que su cava Privilegio de Romale Reserva logra el Gran Espiga. «Desde que comenzamos a elaborar el cava reserva le tenemos un gran cariño. Son cavas de mucha crianza, que es la responsable de que los catadores admiren este producto». Otros premios que recibió ayer Bodegas Romale fueron: Espiga de Plata, en cavas menores de 15 gramos de azúcar por litro; Espiga de Bronce para cavas mayores de 15 gramos de azúcar por litro, y la Espiga de Oro en la categoría de Cavas Premium.

También en los Premios Espiga de Cava hubo otra gran bodega destacada: López Morenas. La industria de Fuente del Maestre logró los siguientes galardones: Espiga de Bronce en cavas de menos de azúcar 15 gramos por litro, Espiga de Plata en mayores de 15 gramos por litro, Espiga de Oro en mayores de 15 gramos por litro y Plata en Cavas Premiun por su Marqués de Lares Semi Seco Blanco. Otro importante galardón fue la Espiga de Oro en la categoría de Cava de menos de 15 gramos litro para Marqués de Badajoz, Extra Brut Blanco que elabora Antonio Medina e Hijos.

A los premios se han presentado 38 espumosos de 9 bodegas, de los que han pasado 25 a la final. Emiliano Zamora, director de la cata, afirmó a tenor de los resultados: «Estamos viviendo la edad de oro del Cava de Almendralejo».

Por aquello del maridaje perfecto, junto con los premios al cava extremeño se entregaron los galardones de la XVIII edición de los premios DOP Dehesa de Extremadura. La Espiga de Oro fue a parar a Industrias Carnicas Villar, empresa soriana con sede en Burguillos del Cerro. Juan de Álvarez, representante de la empresa, asegura que el premio es un reconocimiento al esfuerzo de todos los intervinientes la elaboración desde el campo hasta el secado final en la fábrica de jamones Sabores de la Dehesa. «Allí le ponemos amor y cariño», afirmó.

La Espiga de Plata fue para Montesano Extremadura SA (Jerez de los Caballeros), y la Espiga de Bronce fue a parar a Agriculturas Diversas SL (Llerena). Al concurso se han presentado 16 perniles.

Elena Diéguez, vicepresidenta de la DOP Dehesa de Extremadura, aseguró que estamos asistiendo al «final del modelo de producción local endógena» y que «hemos dejado de ser el ombligo del sector, ya no estamos solos» . Recordó que están apareciendo nuevos países productores de ibérico, entre ellos EEUU. Pidió a las autoridades facilitar la creación de más empresas con vocación exportadora vinculadas a la DOP, más apoyo a la producción, detección y sanción de los fraudes y un plan estratégico para la DOP Dehesa de Extremadura con la creación de un clúster específico.

Urbano Caballo, presidente de Caja Rural de Extremadura, en su intervención ante cerca de 200 invitados, anunció que en próximas ediciones de los galardones de jamón DOP el reconocimiento también se extenderá a los productores. Añadió que los Premios Espiga llevan reconociendo durante años los «mejores jamones del mundo», como son los que están amparados bajo la DO Dehesa de Extremadura, una marca que ofrece una «calidad mundialmente reconocida». Además dijo que la entidad, con 110 oficinas, no descarta nuevas aperturas, para estar más cerca de agricultores y ganaderos.