De la normalidad inicial se ha pasado a problemas puntuales de suministro a algunas gasolineras de la región. El presidente de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de Extremadura, Casto Bravo, aseguró ayer que el parón en la refinería de Repsol YPF en Puertollano (Ciudad Real) ha provocado algunas alteraciones en el abastecimiento a las gasolineras, aunque considera que la situación no es grave. En algunas estaciones los envíos de cisternas han llegado más tarde de los previsto y con menos combustible del solicitado.

Bravo aseguró que ha habido dos casos --en Santa Amalia y en Madrigalejo-- en que los tanques de las gasolineras han permanecido agotados durante horas y sin poder servir a los clientes. Para la patronal extremeña, lo más grave es que Repsol no haya advertido en ningún momento a las estaciones de que el accidente de Puertollano podía provocar una alteración en suministro.

REPSOL: "NINGUN PROBLEMA"

Un portavoz de Repsol YPF aseguró la semana pasada a este periódico que no habría "ningún problema" en el suministro. La refinería de la petrolera bombea los combustibles por un oleoducto de 215 kilómetros hasta Mérida. Allí, la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) lo almacena en grandes tanques, desde donde los camiones cisterna llevan las gasolinas al 95% de las estaciones de servicio.