Los trabajadores del campo iniciarán el 2020 con idénticas condiciones laborales que el 2019 y con el incremento del jornal que se pactó después con un laudo en mayo. Las organizaciones agrarias y los sindicatos aceptaron ayer la propuesta de los mediadores, para prorrogar durante seis meses el convenio colectivo y esquivar así que el día 1 de enero el convenio caduque y las condiciones laborales del sector (con unos 58.000 trabajadores) pasen a estar regidas por el acuerdo de mínimos que supone el Estatuto de los Trabajadores, lo que hubiera supuesto un aumento de la jornada laboral desde las 6,5 horas actuales a las 8 que marca el estatuto; de 1.768 horas anuales ahora, a las 1.827 que supondría el nuevo marco.

A las dificultades que ya había para encontrar un punto de encuentro entre patronal y sindicatos en cuanto a la subida o no de la jornada laboral o el pago de las horas extraordinarias, se unió ayer un nuevo elemento que acabó por bloquear un acuerdo que a primera hora de la mañana se daba casi por hecho en ambas partes: si a principios de 2020 habrá una nueva subida del salario mínimo como ya se plantea.

La cuestión es que los sindicatos entendían que si el convenio era por tres años (como suele suceder) debía incluir una subida salarial en torno al 1%, al margen de lo que pase con el salario mínimo. Pero en el contexto actual de incertidumbre, las organizaciones agrarias no se veían en condiciones de pactar subidas salariales para varios años, después del incremento del salario mínimo que han afrontado en 2019 (del 22%) y de una nueva subida sin definir que podría concretarse en los primeros meses del 2020.

La propuesta de los mediadores que aceptaron las dos partes, tras casi cuatro horas de reunión, fue prorrogar el convenio «hasta que se publique el real decreto sobre el SMI para el año 2020 o en su defecto durante seis meses». Además el acuerdo establece que una vez que se publique ese real decreto, tendrán un plazo de 15 días para sentarse de nuevo, y que el punto de partida será el que ayer había cuando se suspendió la mesa de negociación; con todos los avances que se habían alcanzado en las conversaciones sobre el nuevo convenio durante los últimos diez meses.

salva la situación / A ninguna de las partes le beneficiaba dejar caer el convenio y por eso, aunque pocos estaban ayer contentos, la mayoría al menos sí respiró con una salida que permite salvar la situación a todos: a las organizaciones agrarias, porque aplaca la conflictividad laboral que hubiera supuesto el retroceso de derechos para los trabajadores; y a los sindicatos, precisamente, por ese recorte de derechos que hubiera supuesto no pactar ya un nuevo convenio.

«Es una decepción absoluta. No se puede entender que después de diez meses y con el acuerdo casi cerrado, los sindicatos pongan sobre la mesa nuevas condiciones en cuanto a la duración del convenio o alguna subida salarial al margen» cuestionó el dirigente de Apag Extremadura Asaja, Juan Metidieri, el más crítico con el aplazamiento acordado, que a su juicio supone «perder seis meses» y aporta «más incertidumbre al campo».

Para el representante de UPA-UCE, José Cruz, el aplazamiento era la mejor opción «para todos». «No podíamos asumir incrementos salariales como pretendían los sindicatos, cuando ya se está hablando de una nueva subida del salario mínimo a principios de año que no sabemos a cuánto ascenderá» señaló.

La propuesta de las organizaciones agrarias, por ello, era congelar la subida salarial hasta 2021, cuando hubiera expirado el nuevo convenio que se iba a firmar ayer. Pero los sindicatos rechazaron esa posibilidad.

«No podíamos cerrar un convenio para varios años en el que la subida salarial que se planteara fuera de cero, así que me doy por satisfecho con el aplazamiento de la negociación», valoró el secretario general de FICA UGT, Miguel Talavera.

También alivio en el secretario general de Industria, Saturnino Lagar, «porque evita la ampliación de jornada que se planteaba y nos quita la presión de tener que cerrar un acuerdo en horas para evitar perder las mejoras que supone el convenio», valoró tras la reunión.