Responsables del PSOE y de CCOO de Extremadura analizan la próxima reforma de las pensiones, sobre lo que los socialistas consideran que hay que reformarlas porque aunque ahora no hay problemas sí los pueda haber en el futuro, y CCOO que "no es negociable" aplazar la edad a los 67 años

La portavoz del PSOE de Extremadura, María Ascensión Murillo, resalta que a partir de mañana martes, día 25, el Pleno del Congreso de los Diputados debatirá este asunto y que espera que para el viernes, día 28, para cuando el Gobierno ha fijado la "fecha tope", haya un acuerdo entre las partes implicadas.

Según la dirigente socialista, el sistema "se consolidará, empezará a funcionar con la fecha que se determine como fecha de la edad de jubilación, que fluctúa entre los 65 y 67 años, en 2027", por lo que "quienes en la actualidad tengan expectativas de jubilación no tienen que tener ningún miedo".

"No hay ninguna espada de Damocles sobre quienes tienen más de cincuenta años, sesenta o cuarenta y muchos", subraya Murillo y agrega que el Gobierno no tenía "ninguna necesidad" de plantear la reforma pero que lo ha hecho por "responsabilidad y compromiso" ante "las siguientes generaciones, nuestros hijos".

Argumentado que hay "un problema demográfico" y que hay que acometer la reforma del sistema público de pensiones para garantizar su futuro, al igual que lo hacen otros países de la UE.

Por todo esto, manifiesta que se llegue a un acuerdo "por el bien de todos".

Por su parte, el secretario regional de Pensionistas y Jubilados de CCOO, Reyes Ramos, subraya que es "innegociable" el rechazo a de la edad de jubilación a los 67 años.

En su opinión, es preciso "hacer reformas" para garantizar el sistema público de pensiones pero aplazar la edad de jubilación a esa edad es "algo radical".

También apostilla que hay que "desligar" la superación de la crisis de la reforma de las pensiones.