El Proyecto de Ley de Medidas Tributarias de Impulso a la Actividad Económica de Extremadura continúa su trámite parlamentario, tras aprobarse hoy su debate de totalidad con la abstención de todos los grupos de la oposición, que han anunciado la presentación de enmiendas parciales referidas sobre todo al canon del agua y al céntimo sanitario.

Así, el PSOE ha concretado que pedirá una reducción del canon del agua en un 50 por ciento tanto en la cuota fija como variable, así como la suspensión inmediata, que no la devolución de éste a pensionistas y parados de larga duración, algo que han propuesto también el resto de los grupos de la oposición, que asimismo se han mostrado a favor de la bajada del llamado céntimo sanitario.

El consejero de Economía y Hacienda, Antonio Fernández, ha vuelto a exponer ante el Pleno de la Asamblea de Extremadura el citado proyecto de ley, compuesto por 36 artículos y distintas disposiciones adicionales, y que contempla, entre otras medidas, una reducción del 30 % del canon de saneamiento.

Asimismo, establece una bajada del tramo autonómico del IRPF a las rentas inferiores a 32.000 euros anuales, lo que afectará al 91 por ciento de los contribuyentes, según ha puesto de relieve Fernández, quien ha destacado que con esta medida se persigue que los ciudadanos tengan mayor renta disponible y, con ello, incentivar el consumo.

El proyecto de ley también contempla modificaciones en la regulación autonómica de otros tributos cedidos, como el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados.

Otra de las medidas es la exención del 100 % de la cuota de autónomos durante dos años, medidas todas, según ha insistido el consejero, encaminadas a establecer las condiciones adecuadas tanto para la creación de empresas como para la consolidación de las ya existentes.

También se establecen exenciones en 58 tasas o precios públicos para fomentar la actividad empresarial y se simplifican los trámites administrativos en el área de medio ambiente.

Todos los beneficios fiscales contemplados en el Proyecto de Ley de Medidas Tributarias han sido cuantificados en casi 24 millones por el consejero de Economía y Hacienda, quien ha confiado en que ese dinero sirva para incentivar el consumo en la comunidad autónoma y activar la economía regional.

Antonio Fernández ha insistido en que con esta ley se pretende crear un marco tributario en Extremadura favorable para la creación y consolidación de las pequeñas y medianas empresas que componen mayoritariamente el tejido empresarial de la región "a través de una reducción progresiva de la fiscalidad" y de la reducción o eliminación de trabas administrativas.

El diputado socialista Jorge Amado ha definido esta ley como "de anuncio o de propaganda" y ha dicho que su objetivo es meramente electoral, pues no va a tener, en su opinión, ningún efecto en "los bolsillos de los extremeños" ni en la reactivación de la economía extremeña.

Amado ha indicado que las escasas rebajas fiscales que contempla esta nueva normativa "no compensan para nada" los "sacrificios" que han hecho los ciudadanos con la "política austericida" del PP o con la subida en más de 40 impuestos establecidas en tan sólo dos años por el Gobierno de Mariano Rajoy.

El portavoz de IU, Pedro Escobar, ha criticado que esta rebaja fiscal se plantee cuando en 2014 volverá a negociarse el Modelo de Financiación Autonómica y ha lamentado que el Gobierno extremeño transmita "la imagen de que vamos de sobrados", lo que a medio y largo plazo será perjudicial, ha dicho, para la región.

En ese sentido, ha achacado al Ejecutivo de José Antonio Monago que por "lograr titulares halagüeños a corto plazo pongan a Extremadura en una situación de debilidad".

Damián Beneyto, del Prex-Crex, ha coincidido con Escobar en defender una unificación del sistema fiscal en toda España y ha planteado una bajada mayor del céntimo sanitario y la exclusión y exención en canon del agua en vez del derecho de devolución que plantea la ley.