El futuro de la Central Nuclear de Almaraz recupera protagonismo mañana con la celebración de la asamblea de propietarios (un 53 % por Iberdrola, un 36 % por Endesa y un 11 % por Naturgy), que determinará la solicitud o no de la renovación del permiso de su explotación.

A horas de este encuentro, los partidos políticos extremeños vuelven a discrepar y a mostrar a los ciudadanos el distanciamiento de posturas.

Posición del PSOE

El PSOE de Extremadura considera "muy importante" que las tres empresas propietarias de la Central Nuclear de Almaraz (CNA) "se pusieran de acuerdo" sobre el futuro de la planta y cree que lo "más coherente" es que haya "una prórroga" del permiso de explotación hasta que no exista un modelo alternativo para la comarca.

El portavoz del PSOE regional, Juan Antonio González, se ha expresado ante la reunión de mañana de la Asamblea de Propietarios de la CNA, participada en un 53 % por Iberdrola, un 36 % por Endesa y un 11 % por Naturgy, para debatir si se solicita la renovación del permiso de explotación.

En este sentido, ha subrayado que esto, a diferencia de lo que "quieren hacer ver" algunos partidos, "no es una cuestión de la Junta", pues la central es propiedad de "tres empresas privadas".

Para el PSOE extremeño, parece "coherente y lógico" que "no se pueda cerrar Almaraz hasta que no haya un modelo alternativo", de transición energética, para la comarca del Campo Arañuelo, donde la central "ha generado economía, empleo y riqueza", según recoge la agencia Efe.

La postura del PP

Por su parte, el presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, ha manifestado que confía en que los propietarios de la central pidan la "prórroga de la vida -de la planta- y no la prórroga para un cierre". Tras la reunión del Comité de Dirección del partido, el líder popular ha criticado que el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, trabaje por el cierre de la instalación en favor de las energías renovables.

De hecho, ha vuelto a emplazar al socialista a un debate público monográfico, en la Asamblea de Extremadura o en cualquier otro sitio, aunque "lo ideal sería en Almaraz", para hablar de sus razones para el cierre de la central nuclear con sosiego, argumentos y documentos.

El presidente del PP ha afirmado que Fernández Vara no engaña a nadie, porque todo el mundo sabe que quiere que se cierre y para ello, ha advertido, necesita una "prorroguita" hasta que pueda "enchufar" las energías renovables en el nodo de evacuación de la central.

Ha señalado que los socialistas quieren el cierre porque aparece en su programa electoral y porque votaron en contra en la Asamblea de una propuesta de impulso del PP que instaba al Gobierno español a que no lo autorizara.

También votaron en contra de la modificación de una ley para evitar que los propietarios lo hicieran, ha recordado.

Para Monago, el fin de la planta es cerrar el norte de Cáceres, es "chapar y matar Extremadura", y perder miles de empleos de calidad que dinamizan la zona para cambiarlos por muy pocos trabajos y "no sabemos por qué más".

Podemos a favor del cierre

Alejada de las posturas de los socialistas y populares, se sitúa la de Podemos, cuyo secretario general, Álvaro Jaén, ha aseverado que esperan que no se renueve el permiso de explotación de la Central Nuclear de Almaraz, en Cáceres, ya que pasado el plazo de vida útil sería peligrosa y "tiene que cerrarse tarde o temprano".

Jaén ha matizado que la vida útil de la central está "muy circunscrita", que todos en la comarca de Campo Arañuelo la conocen y que, una vez superado ese lapso de explotación, sería una planta "muy peligrosa. La central tiene fecha de caducidad, debe cerrar y tiene que cerrar", ha explicado Jaén, que ha agregado que durante años se debía haber puesto en marcha un plan de industrialización de la zona y de fomento del turismo, entre otros temas alternativos.