El Grupo Socialista en la Asamblea de Extremadura ha sostenido hoy que la cámara regional controla todos los gastos de la Oficina del ex presidente de la Junta, que ha definido como unas instalaciones de propiedad pública y patrimonio de la Asamblea.

El portavoz del PSOE en esta cámara, Ignacio Sánchez Amor, ha comentado la información que hoy publica el diario El Mundo, en la que se asegura que la oficina del ex presidente, que utiliza Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha costado a los extremeños más de dos millones de euros desde su apertura en 2007.

En cambio, Sánchez Amor ha asegurado que "buena parte" de estos gastos corresponden a la adecuación del local, "que se adquirió en bruto y que se amuebló a criterio de los funcionarios que hicieron los contratos".

"Ni el expresidente eligió la reforma, ni eligió los muebles o el equipamiento", ha sostenido el portavoz de los socialistas en la Asamblea, que ha destacado que todos estos importes eran "gastos que estaban hechos por la Asamblea antes de que Rodríguez Ibarra pisara el local".

También ha asegurado que la dotación de personal se acordó por unanimidad del parlamento regional en la ley reguladora de estas situaciones y que el personal de seguridad se corresponde con el que el Ministerio del Interior considera adecuado.

Además, ha sostenido que otra partida de gastos ha estado destinada a la compra de dos equipamientos completos de vestuario de verano de uno de los escoltas, que aparece bajo la denominación "Suministros: Lencería y vestuario", según obliga el Plan General de Contabilidad Pública.

También ha resaltado que la Mesa de la Asamblea, en la que están presentes los dos grupos parlamentarios, tiene que autorizar todos los gastos que realiza esta oficina y que, hasta el momento según Sánchez Amor, se han aprobado todos por unanimidad.

Por todo ello, el portavoz socialista ha lamentado de Rodríguez Ibarra "deba justificar su más que probada honorabilidad".

El PP defiende el reconocimiento institucional del expresidente

Por otro lado, el Partido Popular planteará en la Asamblea en la nueva legislatura su conformidad con el "reconocimiento institucional" del ex presidente de la Junta, aunque "no por la vía de tener una serie de atenciones protocolarias, gastos, atenciones administrativas, sueldos, etcétera" sino "por otra vía".

Según ha avanzado el portavoz regional del PP, Luis Alfonso Hernández Carrón, su partido entiende que "bastante honor ha sido el haber ostentado la presidencia de la Junta" y que "es un honor que termina y cesa cuando termina su cargo", así como que "a partir de ahí sus funciones de asesoramiento, de ayuda al gobierno tiene que ser cuando sea a demanda, pedida por el propio gobierno que esté en esos momentos, pero no tiene que ser en ningún momento algo que esté totalmente regulado o pagado por los erarios públicos de Extremadura".

"Reconocimiento a la figura de ex presidente sí, pero gastos para la figura del ex presidente y además sin control, sin techo presupuestario, sin establecer control porque ha habido mucha opacidad en esta materia, no, en eso estamos en contra (el PP)".

Ha indicado que el PP planteará "por supuesto" esta postura en la Asamblea aunque finalmente no forme gobierno, y ha avanzado que a partir de los datos publicados por dicho diario el PP regional iniciará sus propias averiguaciones y va a pedir "responsabilidades a quien tenga la responsabilidad de haber realizado estos gastos sin el control que se ha tenido que realizar y sabiendo exactamente cuáles han sido la naturaleza de estos gastos".

Según ha dicho, el PP regional se encuentra "absolutamente sorprendido y escandalizado" por los datos publicados en el diario El Mundo y que evidencian a su juicio que "el despilfarro sin control es la nota dominante" en la oficina de Ibarra.

Para el PP, esto (la oficina de Ibarra) supone "un escándalo nacional y sin precedentes por lo que supone de falta de respeto para los ciudadanos y para los extremeños que están soportando con sus impuestos estos gastos" que según dice a su partido "no" le parece que "van con los tiempos".

Hernández Carrón ha insistido al respecto en que "este tipo de gastos sin control obedece precisamente" a lo que el PP pretende "acabar" en la región, y que son los 29 años de socialismo que "han llevado precisamente a cuestiones como éstas".

Además, considera con lo ocurrido supuestamente con la oficina de Ibarra que "se está pagando la falta de experiencia democrática en estas cuestiones", ya que su partido "se ha fiado de la buena fe en el uso de la oficina" y "ha confiado en que la oficina iba a ser utilizada con racionalidad, especialmente en momentos de crisis económica". Además, ha concluido que finalmente "toda esa buena fe y toda esa confianza depositada" (por el PP) ha sido "absolutamente traicionada".