Todo apunta a que la pugna Floriano-Acedo por la presidencia regional del PP puede tener un tercero en discordia, el ex delegado del Gobierno, Oscar Baselga, quien estaría estaría madurando esta posibilidad, y sopesando apoyos.
Parece que el ex delegado, cuya posible candidatura fue lanzada ayer por Onda Cero y comprobada por EL PERIODICO en fuentes populares, cuenta con cierta fuerza en la comarca de Badajoz, y peso en otras zonas de la provincia pacense, aunque su tirón en Cáceres es más dudoso. Según las mismas fuentes, la operación de Baselga podría ir enfocada no tanto a ser la tercera vía como a demostrar a los otros dos candidatos que tienen que contar con él.
Sea como sea, a día de hoy lo que es seguro es que hay dos aspirantes en liza y, a tenor de las consultas realizadas por EL PERIODICO entre dirigentes populares, la balanza se inclina en este momento a favor del alcalde de Mérida.
De este modo, y en un análisis comarcal, Acedo tendría a su favor, además de Mérida, a Plasencia, Navalmoral de la Mata, Almendralejo, Villafranca de los Barros y Trujillo y una parte de Badajoz. Mientras, Floriano contaría con clara ventaja --aunque no un apoyo absoluto-- entre los 76 compromisarios natos (cargos electos y dirigentes regionales) y la facción de Badajoz que lidera el alcalde y presidente provincial, Miguel Celdrán.
El actual presidente regional también cuenta con el apoyo, manifestado públicamente, del presidente provincial de Cáceres, Laureano León, aunque en el global de la comarca cacereña la situación no está clara en favor de nadie, igual que ocurre en Zafra. Mientras, en las Vegas Altas las preferencias estarían divididas, con Don Benito más proclive a Floriano y Villanueva y otras poblaciones con Acedo, lo que le da cierta ventaja.
Nuevas Generaciones
Al margen de las estructuras territoriales, y visto lo reñido de la pugna, los dos candidatos tendrán que esmerarse para atraer al apéndice juvenil del partido, Nuevas Generaciones (NNGG), cuyo apoyo puede ser decisivo.
La cautela parece ser la consigna en el seno de esta organización, ya que ninguno de los dirigentes con los que se contactó se decantó por una u otra opción. Así, Alberto Casero, presidente de NNGG en Cáceres, apostó por "un debate serio de ideas" que lleve a elegir al mejor candidato para derrotar a Ibarra, y comentó que el elegido tendría que ser "una persona joven, con un liderazgo fuerte, que haga buena oposición a Ibarra en el Parlamento, con experiencia política y de Gobierno, y que haya logrado ya el respaldo de los ciudadanos". O sea, que caben los dos, o no cabe ninguno, según se mire.
Mientras, su homólogo en la provincia pacense, Juan Carlos Perdigón, no fue mucho más explícito, ya que indicó que "es bueno que haya distintas opciones para elegir, aunque también que los dos se integren en una candidatura y luchen juntos". Sobre sus preferencias, dijo que "Nuevas Generaciones esperará a saber qué plantea cada cuál para los jóvenes, y luego decidiremos".
Eso sí, ambos advirtieron a los candidatos para que no utilicen a esta organización en la pugna precongresual.
