RESTOS ORGÁNICOS

J Está destinado a los restos de origen vegetal y animal que se generan en el ámbito doméstico y comercial, siempre que estos sean similares a los primeros. Podemos depositar restos de comida (cocinados, crudos o estropeados), pieles de fruta y verdura, huesos, raspas de pescado, caparazones y conchas de marisco, cáscaras de huevo, pieles y cáscaras de frutos secos, pan, posos de café y bolsas de infusiones. También ramos de flores marchitos, flores y hojas secas, malas hierbas, césped, pequeñas ramas de poda y hojarasca, tapones de corcho, serrín, astillas y virutas de madera natural, palillos, palos de helado, palillos de comida china, palillos de cocinar pinchos, papel de cocina y servilletas usadas. Se deben tirar al contenedor en una bolsa cerrada, mejor si es biodegradable.

NO DEBEMOS TIRAR...

J Colillas, compresas y pañales, tiritas o vendas usadas, algodón, restos de barrer, pelos, bolígrafos y lápices usados, ceniza de chimineas o estufas y excrementos de animales. Todos se deben llevar al contenedor de no reciclable.

VENTAJAS

J El quinto contenedor tiene ventajas económicas, ambientales y sanitarias. Reduce la cantidad de basura orgánica que llega a los vertederos, la peor solución para el problema de los residuos; disminuye las emisiones contaminantes, permite producir energía renvable y nutrientes de alta calidad para las plantas y la agricultura; evita la contaminación de suelos y acuíferos y posibilita un mejor tratamiento del resto de fracciones de residuos.

¿ABIERTO O CON LLAVE?

J En algunos lugares no hay restricciones de acceso, pero en otros funcionan con una llave o tarjeta chip para garantizar la calidad del material.