Una denuncia de la Federación de Protectora de Animales de Extremadura (Fepaex) sobre supuestos malos tratos a al menos una docena de perros, ha puesto sobre la mesa la pregunta ¿Qué ocurre en la perrera de Olivenza?, a la que la Diputación de Badajoz ha dado en concesión el mantenimiento de los perros procedentes del Servicio de Recogida de Animales.

Fepaex presenta en su página web una documento titulado ya sabemos la verdad sobre la perrera provincial de la Diputación de Badajoz y ... hay que cerrarla , enviado a los medios de comunicación, que denuncia el mal estado de una docena de perros, con sus nombres, que han pasado por las instalaciones de Olivenza. Contiene fotos y vídeos sobre los animales, a los que hizo un seguimiento entre el 27 de mayo y el 17 de junio pasados, que muestran cómo los perros entraron en la perrera en buen estado, y ya en los huesos al salir de ella.

La protectora mantiene que es "una perrera-matadero", "un penal" y "un infierno", y denuncia deficiencias en la alimentación, la higiene, la sanidad de los animales, así como que "los que tenían heridas, o han sido sacrificados, o están llenos de parásitos... Y así hasta el 2016, que la empresa tiene el contrato con la diputación". Sobre esa denuncia y sobre los vídeos se ha generado un estado de opinión en la red, y en su página de Facebook, en apoyo a la campaña de Fepaex.

Este colectivo ya denunció el año pasado a la perrera ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y llevó el caso a los tribunales, pero las actas de la inspección del Seprona, como también las del Servicio de Sanidad Animal de la Consejería de Agricultura de la Junta de Extremadura, indican que los perros están en buen estado y las instalaciones en condiciones adecuadas.

En cuanto a la justicia, el juzgado de primera instancia archivó la causa y la Diputación Provincial de Badajoz, ante la que recurrió el colectivo, ratificó el sobreseimiento, como explicaron a este diario el técnico del Area de Agricultura del que depende el Servicio de Recogida de Animales de esta institución, José Manuel Diestro, y la responsable de la perrera, dada en concesión por diez años en el 2006, Manuela Pablo, que muestra las actas de las últimas inspecciones.

La regente de la perrera responde sobre las imágenes difundidas por Fepaex que "la primera foto está hecha en mis instalaciones, pero la segunda no, y esos animales no salieron así de aquí. Además, son un 5%, ¿por qué no hablan del 95% restante?". Y coincidió con Diestro al exponer que "muchos perros llegan en muy mal estado y deben ser sacrificados conforme manda la ley para evitarles sufrimientos", pero el resto permanecen "en perfecto estado de cuidado".

Manuela Pablo considera que "todo es una venganza personal hacia mí", por lo que consideró la denuncia como "un montaje", pues insiste, como el técnico de la diputación, en que según el Seprona y Sanidad Animal de la Junta, "está todo en regla, pues de no ser así habrían decretado el cierre". Pero es que, aclaró, "con 38 euros por perro y una estancia media de 15 días no se pueden hacer milagros".

Este diario ha tenido acceso a las actas de las inspecciones para comprobar la veracidad de lo declarado. Incluso las indicaciones efectuadas en una inspección en abril del 2009, fueron satisfechas y corroboradas en un posterior, en junio.

Las instalaciones

Este diario ha tenido acceso a las actas de las inspecciones para comprobar la veracidad de lo declarado. Incluso las indicaciones efectuadas en una inspección en abril del 2009, fueron satisfechas y corroboradas en un posterior de junio. Y en una visita efectuada a las instalaciones el pasado 13 de octubre, éstas se encontraban con los cheniles limpios, con comida y agua, y solo en casos de madres con cachorros compartían chenil. En esa fecha había 76 perros, con los ocho que entraron por la mañana del Servicio de Recogida de animales, y uno de ellos entró con las patas traseras rotas por un atropello.

Manuela Pablo indicó que los sacrificios, cuando son necesarios por lesiones graves o por haber transcurrido el plazo legal para el mantenimiento de los perros, los realiza un veterinario. Asimismo, añadió que el año pasado entraron 2.954 perros y se dieron en adopción 700, "y ello a pesar de que pedí colaboración a las protectoras para el programa de adopción y no obtuve respuesta", dijo.

José Manuel Diestro indicó que en los cuatro años que lleva funcionando la perrera se ha incrementado el número de animales recogidos de 700 a casi 3.000. Recordó que Fepaex se dirigió a la diputación hace un año y que no ha vuelto a hacerlo, "podrían haber hablado con nosotros antes", dijo, pues ni diputación, ni el Seprona, ni la Junta han hallado irregularidades. Por otro lado, la diputación construirá una perrera en Santa Amalia el año próximo.